El River Plate 2022 hizo su presentación en público con una goleada por 3-0 sobre Platense, en un amistoso sin mayores atractivos más que poder espiar un poco de este nuevo equipo que está armando Marcelo Gallardo y la primera impresión es que, más allá de los nombres, la identidad está intacta.
Antes de repasar algunos de los aspectos que dejó este partido de pretemporada, vale hacer algunas aclaraciones, para poner las "conclusiones parciales" en contexto.
La primera cuestión: las ausencias. River (aunque a Platense también le faltaron futbolistas) no pudo contar con cinco jugadores de selecciones nacionales (Franco Armani, Julián Álvarez, Paulo Díaz, Robert Rojas y David Martínez), y dos excluídos por no haber renovado (Benjamín Rollheiser y Fabrizio Angileri), además de dos en recuperación (Matías Suárez y Juanfer Quintero) y un refuerzo que apenas firmó este sábado, Esequiel Barco. Es decir, 8 nombres habituales titulares en el campeón 2021 y los dos nuevos más resonantes.
La segunda cuestión: el rival. Platense es un equipo de Primera, que hizo una campaña decente en su regreso a la máxima categoría. Pero en esta ocasión, el once dirigido por Spontón no dio la medida. Nunca creyó que pudiera jugarle de igual a igual a River. Ni siquiera lo intentó.
Y en tercer lugar: fue un amistoso de pretemporada, con todo lo que eso implica. Un equipo, más bien dos, equipos en preparación, en un partido que no tiene puntos en juego y, por lo tanto, la intensidad no fue la de un compromiso oficial.
Aclarados estos puntos, lo que se puede concluir del River de Gallardo 2022 es:
LA CONFIRMACIÓN: LA DUPLA ENZO-ENZO NO SE TOCA
Probablemente nadie tenía dudas al respecto, pero con la llegada de tantos mediocampistas de buen pie, todos se preguntan quién sale, quién entra. Bueno, eso quizás ni el propio Gallardo lo tenga en claro aún, pero el triunfo sobre Platense refrescó por qué Enzo Pérez es uno de los mejores volantes del fútbol argentino. De regreso tras una larga inactividad, volvió a ser el gran distribuidor de pelotas de River. Directo, a un toque y sin fallar.
Y se complementó muy bien con Enzo Fernández. El chico que explotó en el segundo semestre del año pasado, fue el ideólogo de cada ataque, para buscar las mejores opciones y que no todos fueran centros al área.OTRA OPORTUNIDAD: PARA ALEX VIGO Y JORGE CARRASCAL
El lateral que llegó de Colón el año pasado no logró encajar en sus primeros meses. No logró ser ese carrilero de ida y vuelta que le gusta al DT. Pero esta vez sí. Se iba a ir a Independiente, después a San Lorenzo, pero quizás haya que darle un tiempo más. Es cierto que, con un rival que no genera preocupaciones en defensa, es más fácil lanzarse al ataque. Pero Vigo lo hizo bien. Fue la principal opción para Enzo Fernández e, incluso, fue quien inició la jugada del segundo gol.
Carrascal tuvo un poco más de 25 minutos en cancha, en los que demostró, por sobre todo, muchas ganas de brillar. Su habilidad es incuestionable, pero es la efectividad de su juego la que genera dudas, más allá del gol, que derivó de una gran acción colectiva generada por él.Tiene categoría para jugar en River, Gallardo cree en él y por eso, los hinchas lo bancan (no quieren repetir la historia del Pity Martínez), pero las llegadas de Juanfer y Barco dan a pensar que no va a tener muchos minutos. Después de un año en el que tuvo varias oportunidades y no logró explotar y asentarse, ¿tendrá él la paciencia para pelearla de nuevo desde el banco?
EN OBSERVACIÓN: JOSÉ PARADELA Y EZEQUIEL CENTURIÓN
Paradela fue otra apuesta del técnico en el mercado pasado y no consiguió brillar. Se consideró su salida, pero se queda. Este sábado tuvo un buen primer tiempo, muy participativo, pero que terminó tapando a Milton Casco. Porque jugó siempre por afuera y no dejó espacio a la subida del lateral, lo que quita una opción al equipo. Con De la Cruz, el uruguayo va de afuera hacia adentro y permite que alguien más se sume por la banda.
No es que lo del ex-Gimnasia no sirva, pero sería una alternativa para partidos y/o rivales específicos.
En cuanto al arquero, Gallardo necesita tener un suplente de Armani confiable. Contra Platense no tuvo errores significativos, pero tampoco fue exigido como para evaluarlo.DE REGRESO POR SU LUGAR: NICO DE LA CRUZ
Al volante uruguayo se lo volvió a ver después de varios meses, tras haber sufrido una trombosis en una pierna. Gallardo lo lleva de a poco. Y, aunque le falta juego y minutos, tuvo algunas pinceladas que dejaron en claro que su habilidad sigue ahí. Claro, el problema es quién sale para darle el lugar. ¿Agustín Palavecino?LOS NUEVOS: LEANDRO GONZÁLEZ PIREZ Y TOMAS POCHETTTINO
El defensor fue el único de los refuerzos que fue titular y desde que lo mencionó la voz del estadio tuvo la aprobación del público y puede decirse que, ante la baja exigencia del rival, cumplió.
Mientras que el volante que llegó desde la MLS ingresó por Palavecino y no desentonó cuando ese mediocampo súperofensivo, que juntó en cancha Gallardo (Fernández, Carrascal, De la Cruz, Pochettino) empezó a asociarse con todos de tres cuartos en adelante, en busca de penetrar al área, ante la falta de un delantero de referencia. Fueron pocos minutos, habrá que seguir viéndolo.
A todo River habrá que seguir viéndolo. Este amistoso con Platense fue apenas un ensayo, pero ni siquiera un ensayo general. Quizás el próximo, contra Vélez y con varios de los ausentes de regreso, sea una buena medida.
Por lo pronto, sólo se pueden sacar conclusiones parciales: pasan los (siete) años, pasan los jugadores, Gallardo sigue y con él, una identidad que ya es su marca registrada.