MÉXICO -- En un ejercicio 100 por ciento imaginativo, basado en el resultado más inmediato de Pumas en Copa Libertadores y en el historial de su director técnico Guillermo Vázquez, cuesta trabajo pensar que no hablaríamos de uno de los mejores estrategas del futbol mexicano moderno, entre los más populares y quizás hasta mundialista, si hubiera estado del lado ganador en las series de penales que le han tocado disputar.
Claro que el hubiera no existe, pero a Memo le gustaría que sí.
Contando la eliminación de Pumas ante el Independiente del Valle la noche del martes, la carrera de Vázquez como director técnico se ha marcado por tres series perdidas en penales, dos de ellas en la Final de la Liga MX.
La más fatídica es bien recordada: domingo 26 de mayo del 2013 en el Estadio Azteca, con todo a su favor para derrotar al América y darle a Cruz Azul su primer título desde 1997. Ya no vale el recuerdo de cómo llegaron a penales, sino que los cementeros comandados por Vázquez fallaron dos tiros (Javier Orozco y Alejandro Castro) y el improbable campeón fue azulcrema.
El resultado impulsó al técnico rival, Miguel Herrera, al banquillo de la Selección Nacional para jugar el 'repechaje' a Brasil 2014 contra Nueva Zelanda. A la postre, el 'Piojo' fue a la justa mundial en un puesto que, hay pocas dudas, era para el ganador de esa final bajo la lluvia de la Ciudad de México.
Vázquez no sólo hubiera acrecentado sus bonos de forma radical como el primer director técnico en ganar un título para la Máquina en tanto tiempo, justo antes del Mundial, sino que habría sumado otro trofeo a su currículum, estableciéndose como una garantía en la nueva generación de técnicos.
Dos años y medio después de esa derrota, con nueva encomienda pero de regreso a los Pumas que hizo campeones en el Clausura 2011, Vázquez dirigió a los felinos a una remontada espectacular contra Tigres, equipo que los goleó 3-0 en el Volcán durante la ida por el título del Apertura 2015. El resultado en Ciudad Universitaria fue de 4-1 al término de la prórroga, lo que daba paso a una nueva oportunidad de sacudirse el fracaso en penales.
Nuevamente, los pupilos de Vázquez fallaron dos tiros (Fidel Martínez y Javier Cortés), suficientes para dar el título para los infalibles regiomontanos.
Estancados en el terreno de la especulación, Memo no sólo estaría empatado como el técnico más ganador en la historia de Pumas (Hugo Sánchez, dos títulos), sino que integraría un grupo elitista de entrenadores con tres campeonatos a sus 49 años --cumplidos este 25 de mayo-- y dentro del Top 10 histórico para México.
Para el último trago amargo, también en Ciudad Universitaria, Vázquez se quedó a un paso de acceder a semifinales de la Copa Libertadores, lo que extiende la sequía de Pumas como el único de los "4 grandes" de México que nunca ha disputado dicha fase del certamen sudamericano, otro simbolismo que lo impulsaría de formas más agradables a la historia del club y del futbol de este país.