BUENOS AIRES -- Real Madrid se retiró de la puja por André Gomes en base a la convicción que hay en el equipo de que James Rodríguez seguirá vistiendo de blanco. Tanto es así que el club rechazó una oferta de 85 millones de euros por él, justo cuando se estaba negociando la operación de Gomes.
Esta circunstancia y las desmedidas pretensiones de Valencia hicieron que Real Madrid descartara la incorporación del portugués. El colombiano confirmó que no tiene intenciones de salir del equipo: “Mi sueño siempre fue jugar en el Madrid y voy a seguir cumpliéndolo porque me voy a quedar aquí”.
James cuenta con el aval incondicional de Florentino Pérez. Además se encuentra a gusto en Madrid y no tiene intención de cambiar de ciudad por mucho que Manchester United, PSG, Bayern, Manchester City o Chelsea intenten conquistarlo. Uno de estos clubes recientemente ofreció cinco millones más de lo que pagó Real Madrid cuando llegó en 2014.
El colombiano deberá incorporarse al equipo el próximo 26 de julio junto a Modric y Ramos. Zinedine Zidane todavía tiene sus dudas sobre James, fundamentadas en que un jugador de alto nivel como él no podría asumir el papel de meritorio (y tampoco el club).
James hizo una gran primera temporada en Madrid, en la que marcó 17 goles en 46 partidos (3.525 minutos, el 66,4% de los posibles). Pero el año pasado se desplomó. “La temporada pasada simplemente fue un bache del que esperamos que se reponga”, apuntan en la planta noble del Bernabéu. No contó para Benítez ni después para Zidane. Terminó la campaña con ocho tantos en 32 encuentros (1.861 minutos, el 39,8%€ de los posibles). Y desapareció de los planes de Zidane en las semifinales y la final de la Champions, en la que no jugó. El francés se decantó antes por Lucas Vázquez e Isco. Toda una declaración de intenciones.