El ex delantero paraguayo recuerda la fórmula para su título de goleo en Apertura 2002 con 29 anotaciones en 19 partidos, marca que sigue vigente

MÉXICO.- José Saturnino Cardozo fue cuatro veces campeón de goleo en el futbol mexicano, siempre defendiendo la playera del Toluca.

Entre los años 1998 y 2003 se coronó con 13, con 15, con 21 y con 29 anotaciones y esta última cifra se mantiene vigente como récord para un campeón de goleo en la Liga MX.

A 18 años de su retiro y cuando el torneo regular del Clausura 2024 está a días de culminar, José Cardozo rememora la manera en que fue campeón con 29 goles en 19 partidos, algo que nadie ha logrado repetir. Aún le sorprende cómo es que pudo hacer “una marca tan increíble”.

“¡Increíble, sí! La verdad no sé qué pasó en ese torneo. Hasta hoy pienso y digo: ¿qué habrá pasado’ ¿Por qué tantos goles en un torneo corto?”, dice en su charla con ESPN.

“Bueno, en ese momento Toluca jugaba muy bien y yo estaba en mi mejor momento, y el objetivo era la culminación de la jugada. Lo único que buscaba yo era estar fino a la hora de concretar, estar en el momento justo, en el momento oportuno, porque sabía que el equipo iba a genera muchas oportunidades de anotar”, sigue narrando lo ocurrido en aquel Apertura 2002.

“Yo tenía hambre de gol. Yo querría hacer goles”, señala José Cardozo. “Si quería hacer 3, hacía 3 si quería hacer 4, los 4. No bajaba los brazos”.

“No pedía cambio porque me dolía la cabeza, no. ¿Me dolía el tobillo?, me infiltraba y jugaba. ¿Me dolía la cabeza?, tomaba una pastilla y jugaba”, enfatiza el exdelantero paraguayo.

“No porque ya llevo 13 goles: ‘ay, ahora sí me duele la panza y ya no quiero jugar y veo más adelante. Total, ya llevo 13’, no. Yo quería hacer 14, 15, 16 y si quería hacer 20 los hacía o más como en ese torneo de los 29. Toluca generaba muchas oportunidades con gente como Fabián Estay, Sinha, Víctor Ruiz, Abundis, y a mí me dejaban solo y estaba en el área y concretaba”.

Agrega que “había ese compromiso y esa alegría de jugar. Es un juego y cada uno asumía su rol, su responsabilidad dentro del campo, dentro del sistema de juego que teníamos. Y en el campo el que hace lo trabajado en la semana y el que toma decisiones en el campo es el jugador. El entrenador pone su sistema, su táctica. Y aparece luego la inventiva del jugador como la había en ese Toluca”.

José Cardozo confiesa que al margen de sus condiciones técnicas, la fórmula para no fallar siendo un centrodelantero y todo un profesional era a ensayar los remates a portería todas las veces que podía.

“Mínimo hacía yo 200 repeticiones a la semana, más de 30 por día; esto te facilitaba mucho también cuando en el partido hacías lo que entrenabas en la semana para finiquitar la jugada, y con mucha alegría porque no deja de ser un juego”.

Advierte que un goleador es goleador haciéndose, ya que “si repites y repites, cuando te toca la oportunidad, que son de 3 a 4 veces en un partido de 90 minutos, podrías uno o dos goles”.

“Pero necesitas repeticiones, ya que para anotar hace falta precisión; allá está el portero, el arco que no es tan grande, entonces, cuando se necesita precisión hace falta mucha repetición”.