Yerry Mina jugó su primer partido con Néstor Lorenzo en la Selección Colombia. Sacó el arco en cero en el triunfo por 2-0 ante Alemania y se acopló bien a su compañero John Lucumí.
Para su regreso a la tricolor trajo el nivel con el que mantuvo a Everton en la Premier League. Seguro, concentrado, atento. En las dos áreas fue importante.
Debutó con el nuevo DT al lado derecho de John Lucumí, el de jugador de más minutos del ciclo. Sus movimientos fueron coordinados aunque exageró con una salida hasta casi la mitad de la cancha para frenar a Jamal Musiala. Su espacio lo cubrió a tiempo Daniel Muñoz cuando el local buscó atacar esa zona libre.
En el juego aéreo tuvo sus mejores números. Ganó los tres duelos contra los atacantes y en ataque tuvo dos opciones de cabeza desviadas por muy poco. Menos aparatoso no hizo faltas, recuperó cuatro veces el balón.
Con el partido 0-0 se animó a rematar al arco de Marc Ter Stegen tras tomar un rebote. Su disparo potente lo despejó el meta local al tiro de esquina. En el segundo tiempo hizo hizo coberturas correctas cuando los laterales tardaron en regresar.
Jugó los 90 minutos sin rastros de las molestias físicas que perjudicaron su última temporada en el fútbol inglés. En el octavo partido de Colombia rindió para siete puntos.
Mina se esforzó por estar en Selección. Lo aprovechó.