Chivas liga victorias en casa; vence a Pachuca con polémica

GUADALAJARA (Omar Fares) -- Chivas regresó a su casa luego de aquel triunfo sobre Pumas con las tribunas repletas. Ya también había transcurrido una semana del empate agónico ante Leones Negros, y con dos partidos sin perder y sumando en su causa por mantenerse en la Primera División.

Al iniciar el partido ante Pachuca, el Rebaño ya tenía el conocimiento del empate de 0-0 de Puebla con Cruz Azul, y cuyo resultado de La Franja le favorecía al equipo tapatío.

Sin que la entrada en el estadio Omnilife alcanzara el grado de espectacular que se registró contra Pumas, esta noche el recinto rojiblanco lucía con miles de aficionados hambrientos por presenciar una victoria más para tener la esperanza de un torneo sin contratiempos.

Pero los primeros 45 minutos presentaron esa versión aterradora de Chivas que viene desde hace tres años. Como local, el Rebaño estaba retrasado, dejando que Pachuca le jugara en sus terrenos, mientras Omar Bravo se quedaba solo en el ataque extrañando la presencia de los lesionados Marco Fabián y Ángel Reyna.

Pachuca era superior en la posesión del balón, y en velocidad ganaba la carrera a los laterales rojiblancos Raúl López, y Carlos Salcido, con Irving Lozano, y Jürgen Damm.

Pero los Tuzos no aprovecharon la inoperancia de Chivas y se fueron en cero en el primer tiempo, y con los 15 minutos de pausa en el vestidor, José Manuel de la Torre reordenó sus ideas, sacudió a su grupo, y salieron a la cancha con mayor intensidad.

A partir del segundo tiempo la actitud de Chivas fue diferente, aumentó su ambición de ir al frente, y ello le redituó en encontrarse con un penalti inexistente que señaló el árbitro Luis Santander al ver caer a Carlos Fierro.

El encargado de cobrar fue Giovani Hernández y al depositar el balón en las redes, acabó con la tensión reinante en el estadio con el 1-0.

Con la ventaja en el marcador de Chivas, Pachuca se vio obligado a buscar a buscar el juego, pero Damm, Ayoví y Lozano se fueron agotando en el ir y venir.

Al final, otra vez, un triunfo dramático, defendiendo la mínima ventaja, con los dientes apretados para acumular otros 3 puntos que lo separan del Puebla.