Schalke consiguió igualar de local ante Maribor en el Grupo G

BERLÍN (EFE) -- Schalke no pudo pasar del empate a un gol ante el modesto Maribor esloveno en un partido en el que al equipo alemán le costó tiempo lograr la intensidad debida, en el que por momentos se vio incluso amenazado por la derrota ante el campeón esloveno y en el que el holandés Klaas-Jan Huntelaar lavó un punto para los locales.

El partido tuvo tres fases claramente definidas. Unos minutos iniciales con Schalke atacando y Maribor contragolpeando. Luego, cuando vino el gol de Maribor, hubo una fase de confusión de Schalke que sólo se acabó cuando llegó el empate con un regalo de la defensa contraria y, finalmente, una fase final en la que Schalke dominó buscando infructuosamente la victoria.

Schalke empezó tratando de hacer respetar su papel de favorito y tuvo algunas buenas llegadas en los primeros minutos, entre ellas una clara ocasión de Huntelaar en el minuto 4.

Más tarde, en el minuto 11, hubo una buena llegada de Eric Maxim Choupo-Moting por la banda derecha cuyo centro fue desviado a saque de esquina.

Maribor, después de la primera andanada de Schalke, empezó a a generar ocasiones en jugadas de contragolpe, sobre todo explotando la banda izquierda que pareció detectar como la zona débil de Schalke.

Por ese costado llegó el gol del campeón esloveno. Viler recibió el balón completamente solo y lanzó un centro que aprovechó Damian Bohar para definir sin problemas desde el punto penal.

El entrenador de Schalke, Jens Keller, reaccionó ante los problemas que estaba presentando su equipo por ese sector y tras el descanso mandó al campo al japonés Atsuto Uchida para sustituir como lateral derecho al desafortunado Ayhan.

El empate lo consiguió Schalke en un regalo de la defensa de Maribor con un pase equivocado que le quedó a Huntelaar en el borde del área y el holandés definió con un remate raso entre dos zagueros en el minuto 56.

Hasta ese momento nada hacia pensar que Schalke pudiera volver al partido, pero a partir de ese momento sólo jugó un equipo. Schalke tuvo ocasiones, en remates de Draxler y Boateng, y Maribor se vio a medida que pasaron los minutos cada vez más limitado físicamente.

Sin embargo, el campeón esloveno logró aguantar hasta el final y se llevó un punto de Gelsenkirchen.