América sale con vida de Pachuca pese a caer 3-2 en la ida de cuartos

Mexsport

PACHUCA (Iván Cañada/ESPN.com.mx) -- La dinámica del Pachuca sentenció al América. El cuadro hidalguense, joven en ideas y en piernas, fulminó a unas Águilas que por momentos lucían fuera del ritmo impuesto por los juveniles. Bien se dice que en la Liguilla es otro torneo y aquí vale lo mismo entrar como segundo o como séptimo. Los partidos son distintos, trepidantes, en los que cualquier descuido se paga muy caro. Primero pegaron los Tuzos, aunque dejaron vivir a un cuadro azulcrema que aprovechó al máximo sus acciones. 3-2 en la Ida y todo por definirse en el Azteca.

No pasaron más de 30 segundos y los Tuzos dieron el primer aviso de que respeto iba a existir poco hacia el campeón reinante. Erick Gutiérrez fue el primero en poner las cosas en claro. Uno de los dos juveniles que tendrían que estar en Australia con el Tri Sub 20 en estos momentos, fue un demonio en el centro del campo y América lo resintió. Simplemente tomó el balón, eludió a un par de rivales y alcanzó a rematar, aunque el balón pasó distante de la meta de Moisés. El aviso estaba hecho.

Lo que vendría después ya estaba en el guión. En ése que Diego Alonso escribió toda la noche y ahora era labor de sus actores llevarlo a cabo. Gutiérrez fue el protagonista. Después de su primer intento, llegó un segundo con dirección de portería e inalcanzable para Moisés Muñoz. Ni aunque se tirara tres veces iba a llegar el portero del América. El daño estaba hecho.

El detalle con los jóvenes del Pachuca es que no se conformaron con un gol de diferencia. De inmediato volvieron a buscar la meta azulcrema cual si fueran abajo en el marcador por dos tantos. Cristian Penilla aprovechó su habilidad y velocidad para desbordar, quitarse la marca de Miguel Samudio de encima y disparar cruzado para vencer a Muñoz. Inicio trepidante que aniquiló a las Águilas.

Lo único que podía frenar a los hidalguenses eran sus propios yerros. Y así fue. La juventud de los de Alonso pasó factura en algunos momentos ante un equipo al que jugar con el marcador en contra no es incómodo. Hubo confianza de más, algunos fallos en los pases y América lo aprovechó. Primero, tras un tiro de esquina regalado por la zaga , que terminó con un disparo de Michael Arroyo de larga distancia que dejó sin opciones a Pérez. Fue un auténtico misil imposible de detener.

Las condiciones causaron que Pachuca volviera a apretar en cada zona del campo. Gutiérrez de nueva cuenta, fue quien tomó el balón, condujo las ideas y las llevó a buen puerto. Una asistencia suya dejó a Nahuelpán de frente al arco para vencer a Muñoz con otro disparo cruzado. América ni siquiera saboreó su gol. Ya tenía otros dos de desventaja. Así se marcharon al descanso.

Tras la vuelta fue más de lo mismo, con un Pachuca ya no tan agresivo al ataque, aunque sí con el control del balón. Gutiérrez, Pizarro y Lozano difícilmente lo soltaban. Entre ellos tres lo rotaban con tanta certeza, que Matosas eventualmente reaccionó ante ello e ingresó a Velasco y Pellerano para responder de alguna manera en el centro del campo.

A eso, hay que añadirle otro yerro en defensa de los Tuzos igualmente aprovechado por América. Un pase equivocado en defensa que dejó a Benedetto frente a Pérez y los de Coapa volvieron a festejar. No fue tanto por una acción creada en conjunto, fue más por la permisividad del rival. Al final el gol vale para lo mismo y los de Matosas así lo entendieron para dejar para la Vuelta todas las opciones abiertas en un serie que por ahora está del lado de los hidalguenses.