Benfica silenció al Vicente Calderón con una valiosa victoria de visita

Paola Núñez

MADRID (Corresponsal ESPN Digital)-- Cayó el Calderón. Benfica sacó una valiosa victoria por 1-2 en su visita al Atlético de Madrid en el partido correspondiente a la segunda fecha de la Champions League tras darle la vuelta al marcador gracias a los tantos de Nico Gaitán y Gonçalo Guedes luego de que Ángel Correa adelantara a los rojiblancos.

Benfica se sabía en tierra hostil. Había anticipado la "agresividad" con que sería recibido por los hombres del Cholo y para contrarrestar esa intensidad en el juego rojiblanco, el cuadro luso salió con el físico por delante, peleando con dureza cada balón y metiendo presión al árbitro. Anulado el músculo local, procedieron a dejar que Nico Gaitán se luciera complicándole la vida a la defensa rojiblanca entera.

Lo que ya no fue tan fácil fue anular el talento que el Atlético de Madrid tiene en los pies de Antoine Griezmann y Ángel Correa. Fue gracias a sus 'joyitas' en ataque que el cuadro local pudo adelantarse. A los 23 minutos de juego y en su primer jugada a la contra, Gabi y Griezmann condujeron el balón a través de territorio enemigo que culminó con un elegante pase entre líneas del francés para que el atacante argentino, con un derechazo, abriera el marcador con su primer gol europeo.

El gol sentó fatal al Benfica, que había tenido varios acercamientos de peligro pese al dominio rojiblanco y buscó el del empate co más ahínco. Lo encontró Gaitán, que ya llevaba media hora amenazando por su banda, al primer error defensivo de los locales. Nelson había enviado un centro al que no llegó nadie y el argentino aprovechó para batir a Oblak con un disparo cruzado.

Ahí se le acabó la racha europea con la puerta a cero como local al Atlético de Madrid. 588 días después de que Kaká, con la camiseta del Milan, marcara a los colchoneros el último gol europeo en el Vicente Calderón. Y ahí enloqueció el encuentro, que no se salió de control por pura suerte, pues quedaba poco para el descanso.

Benfica había llegado al Calderón acompañado por más de 3,000 aficionados a un partido marcado de alto riesgo y fuertemente custodiado por la policía. Para celebrar el tanto, aficionados portugueses lanzaron tres bengalas desde el anfiteatro de la tribuna sur que golpearon en algunos aficionados rojiblancos que ocupaban la grada inferior provocando la intervención de la policía. En la cancha, la tensión entre los 22 jugadores también llegó al máximo y si no llegaron a los golpes tras una dura entrada a un jugador portugués, fue porque intervino Gabi.

El partido cobró cierta normalidad tras el paso por las regaderas, aunque la tensión en el campo era notoria. Atlético intentó retomar el dominio que había ejerció en la primera mitad, pero Benfica, que ya había tomado cierta confianza, no lo permitió. Menos Nico Gaitán, que seguía empeñado en hacer daño dese su banda. Lo logró en cinco minutos. Se lanzó a toda velocidad por su banda para poner un pase a Gonçalo Guedes, quien fusiló al arquero esloveno después de llevarse en la carrera a Filipe Luis.

Al Atlético suele costarle remar a contracorriente en su casa -- particularmente si el rival le toma la medida - y esta vez no fue la excepción. Y eso que Correa y Jackson Martínez buscaron el segundo por todos los medios. Pero ambos habían dejado pasar demasiadas oportunidades en el primer tiempo -- ya fuera por falta de tino o porque se atravesó el poste -- y a medida que pasaba el tiempo, más difícil era llegar al parea contraria, pues casi inmediatamente después de adelantarse, el Benfica se atrincheró. Simeone envió entonces a Vietto y a Fernando Torres para dar mayor velocidad al ataque rojiblanco.

El problema fue que para ello tuvo que prescindir de Griezmann y Correa. Sin ellos, abrir espacios fue casi imposible. Peor aún para los locales: aunque Benfica se había guardado a Jonas y Raúl Jiménez, cuya presencia se notó más por la rechifla con la que fue recibido que por su impacto en el juego, Gaitán seguía dando lata por izquierda y si no era porque Gabi y Saúl se acercaban a ayudar, Juanfran no tenía como detenerlo. Y entre cuidar que Benfica no ampliara la ventaja y ahogar -- como fuera -- a Julio César sin éxito alguno se le fue el partido al Atlético y con ello los tres puntos y el liderato de grupo, que ha quedado por el momento en poder del Benfica.