LOS ÁNGELES – La noche del viernes dejó en evidencia que los últimos dos casilleros de la rotación de Dodgers de Los Ángeles es bastante más inestable de lo esperado.
Tras la noticia de la marcha de Josh Beckett a la lista de lesionados, Dan Haren se volvió a despachar con una actuación decepcionante que solo sirve para acrecentar las dudas relacionadas a la necesidad de sumar un nuevo abridor.
Está claro que Clayton Kershaw, Zack Greinke y Hyun-Jin Ryu son quizás el mejor trío de la Gran Carpa, pero una rotación ligamayorista depende cinco serpentineros y, hoy por hoy, los blanquiazules cuentan con tres y medio.
Haren volvió a sufrir de un comienzo lento, pero a diferencia de otras ocasiones, esta vez no fue capaz de enderezar el barco. El derecho duró solo 4.0 capítulos en la derrota por 6-3 ante los Padres de San Diego, y tuvo que darle paso a Jamey Wright y el resto del bullpen bastante temprano. El cuerpo de relevistas de los Dodgers venía con poco trabajo, por lo que esto no fue necesariamente un inconveniente mortal, pero sí despierta una medida de preocupación de cara al descanso por el Juego de Estrellas.
"Estoy buscando", dijo el serpentinero acerca de una solución. "Pasé algo similar la temporada pasada, llegó el descanso por el Juego de Estrellas, y fui capaz de hilvanar varias buenas salidas. Tengo que contribuir más para que este equipo llegue adonde quiere".
Haren aclaró que no se trata de un problema físico, dijo sentirse mejor ahora que en abril o mayo, y recordó que en 2013 pasó por una racha similar con los Nacionales de Washington.
"El año pasado fue un desastre desde el principio", confesó. "Es difícil comparar pero lo pude dar vuelta de gran manera. Estoy casi tan frustrado como entonces".
Se sabe que Beckett, cuando salta a la lomita, da entradas de calidad, evidenciado por su efectividad de 2.26 y el inolvidable sin hit que logró en Philadelphia. Sin embargo, Don Mattingly ya se había referido varias veces a lo que le cuesta al texano la recuperación entre salida y salida, y acabaron por darle algunos días de descanso para que pueda tener reposo y recuperar su malograda cadera izquierda.
"Estamos bien", aseguró Mattingly. "Tengo confianza en Dan y sé que Josh lo está haciendo bien. En este punto no estamos muy preocupados".
El problema mayor pasa por Haren (8-6), que vio su efectividad subir de 3.57 a 4.23 en solo dos encuentros, y por la falta de profundidad y opciones en las ligas menores. Los Dodgers utilizarán a Paul Maholm el sábado para tapar el hueco que generó Beckett, pero la confianza en este es limitada. En Triple A los nombres de Red Patterson, Stephen Fife y Carlos Frías no ilusionan, mientras que el prometedor Zach Lee tiene un promedio de carreras limpias de 4.93 en su primer año en AAA.
"No estuvo tan afilado como ha estado", explicó Mattingly. "Se trata de ejecutar. Dan tiene menos margen de error que en el pasado y tiene que ser capaz de ejecutar sus pitcheos".
Esto solo servirá para calentar más el mercado, con David Price como el objetivo principal de todos los que necesitan pitcheo. Los Dodgers tienen los prospectos y la estabilidad económica como para absorber el contrato en 2015 del astro zurdo, pero por ahora se estarían negado a aceptar las demandas de los Tampa Bay Rays.
Haren, por lo pronto, hizo autocrítica, evitó las excusas y reconoció que sólo se lo debe juzgar por el producto final.
"Nos juzgan por los resultados, y más allá de cómo me sentí, los resultados son terribles", apuntó. "Me sentí bien pero no significa mucho. Me sentí bien en mis últimas salidas pero no han sido muy buenas".