ESPN Los Angeles
Carlos Nava 8y

DeAndre Jordan regresa a donde nunca llegó...y Dallas lo recibe

DALLAS -- Será la segunda vez que los Mavericks enfrenten a Los Angeles Clippers. Pero será la primera en Dallas.

Será la primera vez que DeAndre Jordan regrese al lugar donde nunca llegó, pero en el que tiene muchos "enemigos" y otros que apenas está por crearse.

Los Clippers y Jordan visitan a los Mavericks, que tienen muchas cosas por qué preocuparse que este miércoles se volverán secundarias para tratar de cobrar la que consideran una ofensa personal, "no de negocios".

Jordan aceptó de palabra un contrato para jugar con los Mavericks, que decidieron preferirlo a él y dejaron ir por segunda ocasión a Tyson Chandler.

Apenas cinco días después, Jordan se echó para atrás, rechazó el contrato; se quedó con los Clippers y dejó a los Mavericks como "el perro de las dos tortas", sin centro.

"Sean ruidosos", pidió el guardia de los Mavericks José Juan Barea a los aficionados. "Déjenle saber cómo se siente. Sean ruidosos cada vez que toque la bola. Tan pronto como toque la bola, póngase locos. Incluso desde el calentamiento, todo el tiempo".

Buena parte de la prensa local, también está motivando a los aficionados para que presionen y molesten a Jordan tanto como sea posible.

El periódico de mayor circulación en Dallas publicó en su versión digital una cara de Jordan "satanizada" con cuernos y pide a sus lectores que si van a la arena este miércoles la recorten y la muestren todo el tiempo.

Una de las estaciones más populares de radio en la ciudad desde el martes y muy temprano este miércoles motiva a sus oyentes para que se pongan de pie cada vez que Jordan toque el balón, en especial durante los tiros libres, y griten tan fuerte como puedan todo lo que se les ocurra, aunque sin palabras antisonantes por respeto a las familias que visiten el American Airlines Center, fans de los Mavericks.

"Pónganse de pie, véanlo a los ojos y griten como locos", dijo uno de los locutores de la estación antes de las 8 a.m. hora local. "Creo en eso de la vibra y hay que hacerlo sentir con la peor que jamás haya imagino. Tiene que sentir en todo momento lo que piensa esta ciudad, esta región completa de él".

Para los Mavericks, ha sido un inicio más complicado de lo acostumbrado, con marca 3-4, que incluye una derrota apenas el martes en New Orleans, donde sus Pelicans ganaron su primer juego de la temporada.

Antes, el pasado 29 de octubre, los Mavericks habían perdido por vez primera esta campaña frente a los Clippers, 104-88, en la que Jordan sólo anotó seis puntos, pero ganó 15 rebotes.

Jordan, de 26 años, pareció tener tomada la medida abajo del aro a los Mavericks la temporada pasada.

10 de enero pasado, logró 15 rebotes y 13 puntos; explotó el 2 de febrero con 27 rebotes y 22 puntos, y cerró el 13 de marzo con 18 rebotes y seis puntos. En la campaña 2014-15 promedió 20 tableros contra los Mavericks.

"Nadie niega que tiene talento", dijo el delantero de Dallas Chandler Parsons. "Pero hay cosas que no se hacen, ni como profesional, ni como persona".

Para los Mavericks la vida hubiera sido menos complicada con Jordan abajo de los tableros; una posición en la que de manera histórica les ha costado trabajo.

Cuando Jordan cambió su decisión, el dueño de los Mavericks, Mark Cuban, tuvo que salir desesperado a buscar un centro. Encontró a Zaza Pachulia, quien ha tenido un inicio decente de temporada.

Los Mavericks tienen marca de 3-1 en los cuatro partidos en que Pachulia ha ganado al menos 10 rebotes.

"Tenemos el equipo que queremos y podemos", dijo Dirk Nowitzki. "Somos profesionales y cada quien toma las decisiones que considera pertinente para si mismo, incluidas razones personales. Igual sucede con los clubes, que en ocasiones tienen que tomar las decisiones que consideran son mejor para ellos".

De cualquier manera, Cuban dejó entrever que la recepción de Jordan en Dallas distará de ser la más cordial.

"Esto es entretenimiento y unas de las cosas divertidas para hacer en la NBA es venir y abuchear gente", dijo Cuban en días pasados. "Esta no es la guerra termonuclear. Esto es un partido de basquetbol y se supone que sea divertido para los aficionados".

"Espero que ellos (aficionados) griten, se hagan sentir...".


ES BUENO SABER QUE...

DeAndre Jordan promedia 13.3 rebotes por partido, la segunda mejor cantidad en toda la NBA.

Zaza Pachulia promedia para los Mavericks 9.4 rebotes por juego; décimo quinto en la NBA.

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