LAS VEGAS -- Ana María Barragán Fernández ni siquiera recuerda haber visto a su hijo jugar fútbol cuando era niño, como la mayoría de los que crecen en Jalisco, México.
Sólo se acuerda que desde muy pequeño siempre soñó con ser un boxeador tan popular como Julio César Chávez y Óscar de la Hoya.
La mamá de Saúl "El Canelo" Álvarez asegura que siempre supo que su hijo llegaría hasta donde está ahora, en la cima del boxeo mundial.
"Siempre me decía que iba a llegar a ser campeón mundial y llegó", dijo Barragán Fernández. "He visto todos estos años cómo se ha preparado, el trabajo y las ganas que le echa…".
"Siempre le dije que cualquier cosa que hiciera, la hiciera con todas las ganas", agregó. "Y así es hasta ahora".
"El Canelo" Álvarez estelarizó por vez primera una función de boxeo en Las Vegas en la celebración de la Independencia Mexicana, el pasado sábado 15 de septiembre.
Noqueó en el sexto round a Josesito López, un boxeador con ganas, pero que en realidad tuvo poco que hacer contra el campeón mundial Superwelter del CMB frente a 14,275 aficionados, en su inmensa mayoría mexicanos, que llenaron el MGM Grand Arena.
"Así me decía que quería verse, como esos ídolos mexicanos que boxeaban acá (en Las Vegas)", recordó su mamá, con lágrimas en los ojos y una muy visible emoción, un par de horas después de que finalizó el combate.
"Mi hijo se merece esto", agregó. "Siempre ha luchado por todo lo que ha querido".
"El Canelo" Álvarez, uno de siete hijos de la señora Barragán Fernández, comenzó a llamar la atención desde muy pequeño, cuando acompañaba a su hermano Rigoberto "El Español" Álvarez al gimnasio, en su incipiente carrera profesional.
"Fue cuando sea interesó por el boxeo", señaló Barragán Fernández. "Cuando veía a su hermano quería comenzar a pegarse con todo en el gimnasio".
Para el 2005 y 2006, "El Canelo" Álvarez ya era bicampeón de la Olimpiada Nacional en México.
Con la victoria sobre López y la derrota de Julio César Chávez Junior ante Sergio "Maravilla" Martínez, "El Canelo" Álvarez quedó como sólo uno de tres campeones mexicanos invictos, junto a Leo Santa Cruz (Gallo de la FIB) y Abner Mares (Supergallo del CMB).
"Me duele la derrota de Julio César", afirmó "El Canelo" Álvarez. "Siento tristeza de que haya perdido. Hoy perdió un campeón mexicano y eso nos afecta a todos nosotros".
"Espero que pueda recuperarse de esto y siga adelante con sus carrera", agregó. "Es un gran boxeador y saldrá fortalecido de todo esto".
Ahora, a los 22 años, es uno de los ídolos mexicanos.
"No me gusta hablar, me gusta trabajar y cumplir con la gente; es mi responsabilidad", comentó después de noquear a López el sábado pasado. "Si la gente cree que soy ídolo, a mi no me importa ni me preocupo".
La señora Barragán Fernández dijo que a pesar de que la gente lo reconoce, consiente y mima de diferentes maneras, su hijo no pierde el piso; es un muchacho maduro, de familia y humilde.
"En la casa sigue siendo el mismo", afirmó. "Es uno más de los hijos. Pero es muy noble y siempre está pendiente de nosotros, de todos, de la gente que lo conoce desde que era niño".
"Cuando tengo que darle un jalón de orejas, se lo doy", añadió. "Pero casi nunca, porque es muy buen hijo".
Álvarez estuvo el sábado en el MGM Grand acompañado de la mayoría de su familia.
"Me siento contento y motivado de que mi mamá y papá estén aquí", mencionó. "Sólo escuchaba los gritotes de mi mamá por toda la arena...".
"El Canelo" Álvarez aseguró desconocer su futuro inmediato en el boxeo.
Dijo que se tomará un tiempo y meditar posibles fechas y rivales, aunque de algo sí está seguro.
"Estoy listo para enfrentar a los más grandes, quiero enfrentarme a los mejores campeones", expresó. "Yo nací listo para los mejores del box".