MINNEAPOLIS -- Incluso para un aficionado nuevo del béisbol no sería difícil enamorarse del tremendo talento del juvenil lanzandor mexicano Julio Urías.
Urías, de 17 años, lanzó una entrada en blanco y abanicó un bateador contra Estados Unidos durante el Juego de Futuras Estrellas de Grandes Ligas, el domingo en el Target Field de Minnesota.
El sinaloense, que entró a lanzar en la quinta entrada por la ecuadra de El Mundo --un roster compuesto por los mejores jugadores extranjeros que militan en las ligas menores del béisbol organizado-- lanzó de strikes 11 de sus 14 lanzamientos, la mayoría rectas, entre 92 y 95 millas por hora.
Todo eso no sería tan asombroso si Urías, quien nació el 12 de agosto de 1996, no fuera el jugador más joven del partido y tuviera rivales que le superan hasta por seis años de edad.
"Se siente muy bonito, es un orgullo estar con tantos muchachos buenos", dijo Urías a ESPNdeportes.com. "Agradezco a Dios y los Dodgers por todas las oportunidades y lo mucho que me han ayudado", agregó.
Con un jonrón de 400 pies de Joey Gallo, el mejor prospecto de los Vigilantes de Texas, contra el dominicano Michael Feliz (Astros de Houston) Estados Unidos derrotó 3-2 a El Mundo. Fue la quinta victoria consecutiva para los prospectos norteamericanos, que han ganado 10 de 16 Juegos de Futuras Estrellas.
Volviendo a Urías, con el chico no hay muchos secretos: El principal prospecto de la organización de los Dodgers de Los Ángeles posee una recta de 95 millas por hora que combina excelentemente con cambio de velocidad, curva y slider. Todos sus lanzamiento se mantienen cerca de la zona de strikes y luce como un veterano encima del box.
En su debut en el profesionalismo el verano pasado-- a los 16 años-- tuvo 2-0, 2.48 y 67 ponches en 54.1 innings en la clase A baja. En 2014, tiene efectividad de 3.44 y 58 ponches en 52.1 entradas con Rancho Cucamonga en la Liga de California (Clase A fuerte), donde la mayoría de jugadores tiene alrededor de 20 años de edad.
Urías llamó la atención del mundo del béisbol cuando el legendario scout Mike Brito lo reclutó con un bono cercano a los $2,0 millones de dólares en agosto del 2012. Brito es el mismo que firmó al gran Fernando Valenzuela, el mejor lanzador mexicano de todos los tiempos y quien, al igual que Urías, era zurdo.
En marzo, los Dodgers lo pusieron de abridor contra los Padres de San Diego en un juego de la temporada de exhibición de Grandes Ligas y el chico respondió sin inmutarse, abanicando a dos de tres bateadores, todos del roster regular de los frailes.
"Es normal. Hay que estar enfocado en lo que uno quiere, hay que estar preparado para todo", dijo el lanzador.
Si los planes de los Dodgers se mantienen, Urías debe jugar en Doble A en algún momento entre el final del 2014 y el próximo año, lo que le pondría más cerca de un montículo de las ligas mayores. Valenzuela debutó con los Dodgers a los 18 años de edad en 1980 y fue el Novato del Año y Cy Young de la Liga Nacional en 1981.
"La verdad, es difícil, pero si Dios lo quiere así, estaré preparado", dijo Urías de un potencial llamado a la gran carpa.
"Estoy restringido con mis pitcheos, pero los Dodgers son los que saben y los que tienen mi futuro en sus manos. Cuando me llamen, estaré listo", agregó.