Yoenis Céspedes ha jugado apenas 19 partidos con el uniforme de los Mets de Nueva York, suficientes para meterse en un bolsillo a la exigente fanaticada de la Gran Manzana, que reconoce en el cubano al líder ofensivo que necesitaba el equipo para el empujón final hacia la postemporada.
Con una personalidad reservada, Céspedes prefiere que sea su bate quien hable por él, sin olvidar el poder de su brazo, que cada vez menos corredores se atreven a desafiar.
Por segunda ocasión en el mes de agosto, el cubano es el mejor latino de la semana de la Liga Nacional.
Entre el domingo 16 y el sábado 22 de agosto, Céspedes disparó 11 hits en 28 turnos, para average de .393, con siete carreras anotadas y 11 impulsadas, siete de ellas en un solo partido, un tope en su carrera.
Como extrabases, el cubano, adquirido por los Mets procedente de los Tigres de Detroit, conectó un doblete y cuatro cuadrangulares, para un slugging de .857.
Su compañero de equipo, el venezolano Wilmer Flores, también tuvo una gran semana ofensiva.
Flores es otro que se ha convertido en un preferido de la afición neoyorquina tras sus sentidas lágrimas ante un canje de equipo que al final no se dio.
El venezolano se fue de 19-8 (.421), con cinco carreras anotadas y cuatro empujadas, con par de biangulares y un bambinazo como extrabases, para slugging de .684.
Uno que comenzó su carrera con el uniforme de los Mets y ahora está con los Rockies de Colorado es el quisqueyao José Reyes.
En 29 turnos, Reyes bateó 11 cohetes, para average de .379, con cinco anotadas y cuatro empujadas.
Como extrabases, el explosivo jugador sumó par de dobletes y otros tantos vuelacercas, para slugging de .655.
Muy bien le fue también al venezolano Andrés Blanco, a quien le tocó ocupar la antesala de los Filis de Filadelfia ante la ausencia por lesión del prometedor Maikel Franco.
Blanco ligó ocho hits en 20 veces, para average de .400, con cinco anotadas y tres empujadas, tres dobles, dos jonrones y slugging de .850.
Frío, frío
El venezolano David Peralta fue el mejor latino de la pasada semana en la Liga Nacional.
Siete días más tarde, se enfrió por completo, como si hubiera perdido su toque por arte de magia.
En 20 veces al bate, el jardinero venezolano de los Diamondbacks de Arizona ligó solamente tres hits, para un anémico promedio de .150, en tanto abanicó en cuatro ocasiones.
Y su compatriota Williams Pérez, abridor novato de los Bravos de Atlanta, fue bateado libremente en las dos aperturas que hizo durante los últimos siete días.
En total solamente pudo sostenerse en la lomita por 11 episodios en dos salidas, en los que aceptó 15 hits y diez carreras limpias, para un promedio de efectividad de 8.18.
Pérez propinó seis bases por bolas y salió cómodo, pues solamente cargó con la derrota en una de las aperturas, mientras que en la otra se fue sin decisión.
Para esta selección se tomaron las estadísticas entre el domingo 16 y el sábado 22 de agosto.