<
>

Wright abrumado con recepción

NUEVA YORK -- Cuando David Wright fue colocado en la lista de lesionados en la segunda semana de la temporada con un tirón en la corva derecha, el antesalista de los Mets de Nueva York anticipaba regresar en un par de semanas.

Pero el diagnosis de una condición en su espalda, conocida en los términos médicos como estenosis vertebral, completamente desvió su retorno al plantel de la escuadra neoyorquina.

Luego de cuatro meses de inactividad, Wright regresó al diamante y se reunió con el plantel de los líderes de la División Este de la Liga Nacional el lunes pasado en Filadelfia donde Nueva York finalizaba una gira con cuatro partidos.

Entusiasmado con la recepción que le brindó la fanaticada en su primer turno en Citizens Bank Park antes de conectar un jonrón, Wright se sintió abrumado con la bienvenida que le dio la afición en su primer partido en Queens desde el pasado 14 de abril cuando se lastimó la corva derecha.

El jugador franquicia completaba su rutina de ejercicios en la grama del jardín junto a sus compañeros cuando fue ovacionado tras anunciarse en la pantalla de estadio la alineación del conjunto local antes del inicio de la serie de tres juegos contra los Medias Rojas de Boston.

La bulla de los 39,401 espectadores aumentó cuando Wright hizo su primera caminata de la noche hacia la caja de bateo y tuvo que retirarse de ella mientras continuaban los gritos y aplausos antes de ofrecerle al primer lanzamiento que entonces elevó al campocorto.

No obstante, fue una noche agridulce para el veterano de los Metropolitanos, quienes fueron superados por los Medias Rojas 6-4 en 10 entradas.

“Sabes, fue increíble. Aún fue más aquí esta noche. Uno como que sueña y piensa y en la mente reproduces cómo vas a entrar a la caja de bateo por primera vez, corriendo para estirarse, el tipo de emoción que vas a recibir, la excitación, lo nervioso que puedes estar”, explicó Wright. “Pero esto superó todo lo genial que fue. No puedo agradecer a los fans lo suficiente por ese apoyo, esa ovación. En cierto modo me desconcentre en mi juego un poco. Tuve que salir (de la caja de bateo) y enfocarme con la tarea en cuestión porque estaba abrumado por el apoyo”.

La preocupación inicial tras la revelación del estenosis vertebral, dentro y fuera del camerino y en las gradas de Citi Field, no estaba basando en cuando Wright iba a regresar, si no si iba a volver a jugar esta temporada.

Su ausencia en el medio de la alineación se sentía, especialmente en aquellos partidos cuando le costaba a los Mets fabricar al menos una carrera.

El proceso de rehabilitación fue largo y agotador, pero nunca perdió la esperanza, incluso en los peores días.

Debido a su condición con la espalda, Wright debe pasar por un tratamiento de casi tres horas para entonces poder tomar su práctica de bateo y fildeo antes de iniciar cada partido.

“Hubo muchas dudas. Si rebobinas tres o cuatro meses a partir de ahora, no supiera qué esperar. Yo tenía la esperanza. Traté de mantenerme tan optimista como fuera posible. Pero nunca se sabe qué esperar de esto”, afirmó Wright, quien conectó dos hits en cinco turnos.

“Uno sabe que fue mucho trabajo. Había un montón de gente que me ayudó a llegar a este punto. Hubo ciertas dudas en el camino”, continuó. “Te despiertas y algunos días son mejores que otros. Te despiertas en esos malos días, mentalmente ese día te derrota, pero perseveras. Empujas hacia delante. Todo vale la pena cuando llegas a este punto y tienes la oportunidad de unirte a este equipo durante esta marcha y juegas frente a estos aficionados”.

Wright demostró que estaba en condiciones cuando anotó desde primera base tras un error por el jardinero derecho de Boston, el cubano Rusney Castillo, quien no pudo acorralar un hit. Wright iba a parar en la segunda base pero siguió y cuando iba a detenerse llegando a la antesala, el coach de tercera base Tim Teufel le dio luz verde. El toletero entonces aceleró hacia el plato y llegó salvo pese a que el receptor había dejado caer el tiro del inicialista dominicano David Ortiz.

Por primera vez en Citi Field, Wright pudo sentir el tipo de energía de una afición neoyorquina totalmente entregada con cada lanzamiento de un partido en esta época de la temporada en Citi Field desde los últimos tres años que pasaron los Mets en Shea Stadium.

“Fue todo lo que anticipé”, dijo. “Este lugar se estaba estremeciendo. Desafortunadamente, no pudimos lograrlo... pero la pugnacidad de este equipo es increíble”.