ARLINGTON -- Si alguien hubiera apostado porque los Vigilantes de Texas estarían en la postemporada este año, todos hubieran pensado que estaba loco.
Pero ahí están otra vez los Vigilantes, ya asegurados al menos para disputar el partido de comodines y con tres oportunidades para conseguir el triunfo que confirme el campeonato de la División Oeste de la Liga Americana.
Una proeza, si se considera que su mejor lanzador, Yu Darvish, quedó fuera desde antes de comenzar la temporada; su segundo pítcher de la rotación, Derek Holland, se lastimó en su primera apertura y regresó hasta septiembre; el tercero, Yovani Gallardo, ha sido inconsistente y lanza pocas entradas.
Y más heroico el boleto a playoffs de un equipo que en julio llegó a estar a nueve partidos de distancia del liderato divisional y en agosto a ocho de diferencia.
"Este año es más especial porque hubo que poner mucho trabajo y muchas personas quizá no consideraban que íbamos a estar donde estamos ahora mismo", dijo Adrián Beltré. "Nosotros sabíamos como equipo que teníamos el talento suficiente para estar aquí".
"No ha sido fácil", agregó. "Pero creo que el equipo completo puso poquitas cosas cada uno para poder ganar juegos como se pudiera".
Los Vigilantes derrotaron el jueves a los Angelinos de Los Angeles 5-3 en un partido en que el abridor Derek Holland sólo permitió tres hits en seis entradas y un tercio.
Beltré produjo tres carreras para echarse el equipo a hombros, como ha sido en el cierre de temporada. El antesalista de Texas produjo 29 carreras en septiembre.
Los Vigilantes (87-72) tienen la segunda mejor marca de la Americana desde el 21 de julio a la fecha, que incluye 20 partidos arriba de .500; nada mal para un equipo que fue el peor de la Liga la campaña anterior y que este año ha ganado 20 partidos más que en todo el 2014.
"No creo que pueda especificar un aspecto sólamente", dijo Beltré en referencia a los detalles que hicieron la diferencia en la segunda mitad de temporada para tan radical cambio. "Creo que como equipo crecimos más juntos y comenzamos a creer más todos en el uno al otro".
"Encontramos maneras de hacer el trabajo, ya sea ganando juegos 2-1, 1-0 o ganando 14-3", añadió. "Yo creo que el punto principal fue que el pitcheo se matuvo siempre estable; mantuvo al equipo cerca y dio oportunidad a la ofensiva de que pudiéramos regresar y ganar los juegos".
El manager de los Vigilantes, Jeff Banister, puso nombre y apellido al resurgimiento de su equipo, Adrián Beltré.
"Sin su liderazgo y entrega, jamás lo hubiéramos logrado", dijo Banister. "Ha sido un ejemplo. Juega con dolor, da todo lo que tiene, que aún es mucho... Todos los días llega listo para jugar. Los muchachos lo ven como un ejemplo".
Sin embargo, Beltré ponderó la labor de equipo en todos los aspectos, incluida la labor de los directivos al conseguir piezas que en algún momento hacían falta, como el abridor Cole Hamels, refuerzos en el bullpen y el regreso de bateadores como Josh Hamilton y Mike Napoli, sin descontar el descubrimiento del novato Delino DeShields.
"Los jugadores clave han hecho las jugadas todo el año", mencionó. "Al principio de temporada y casi toda la temporada, Prince (Fielder) estuvo ahí manteniendo al equipo a la ofensiva. Durante los últimos tres meses (Shin-Soo) Choo ha estado ahí, increíble".
"Elvis (Andrus) ha despertado y ha estado mucho más estable en la defensiva y ofensiva", agregó. "(Rougned) Odor, después de que regresó de las Menores, ha tenido tremenda temporada ofensivamente. Te puedo mencionar 100 mil casos más. Como equipo todos lo hicimos completo".
Beltré, Andrus, Holland, Hamilton, Napoli, Mitch Moreland, Colby Lewis y Leonys Martin son los únicos sobrevivientes en la organización del equipo de los Vigilantes que se coronó en la Liga Americana por última vez.
Para Andrus, este boleto a playoffs es más especial aún.
"Es un paso bien grande, en especial por la manera en que se desarrolló la temporada para nosotros", dijo Andrus el jueves. "Tantas personas que nos dejaban afuera desde antes de empezar la temporada y aquí estamos demostrando que este equipo está hecho para grandes cosas".
"Este equipo que como dice la frase "Never Ever Quit"", añadió. "Nunca vamos rendirnos, vamos a pelear hasta el último momento. Estamos bien contentos de la manera en que estamos jugando y por supuesto hasta que podamos ganar la división".
Esa es la única asignación pendiente rumbo a la primera meta que los Vigilantes dicen que se fijaron desde las prácticas primaverales, el campeonato de la división.
Un triunfo el viernes o una derrota de los Houston Astros y alzarán el banderín del Oeste de la Liga Americana por tercera ocasión en está década, después de asegurar el boleto a postemporada por cuarta ocasión en seis campañas.
"Estamos contentos hoy", expresó Beltré el jueves. "Tenemos un lugar en los playoffs, pero todavía nos falta un paso más, que es ganar la división y queremos que sea mañana (viernes)".
"Es agradable estar en esta situación de playoffs y veremos qué sucede", agregó. "Nosotros creemos que tenemos el equipo para competir todo el camino y ese es nuestro último objetivo".