El joven prospecto Prichard Colón se encontraba en estado de cuidado en la mañana del domingo luego de haber sido intervenido el sábado en el Hospital Inova Fairfax de Virginia, tras sufrir un sangrado cerebral a raíz de la derrota ante el norteamericano Terrel Williams durante el evento presentado en el EagleBank Arena de la Universidad de George Mason.
El púgil, que hasta antes del revés marchaba invicto con marca de 16-0 y 13 nocauts, respiraba por cuenta propia según explicó su padre, Richard Colón, pero presentaba un cuadro de fiebre luego de la operación por lo que era mantenido en cuidados intensivos.
También fue sometido en la madrugada del domingo a una prueba de resonancia magnética.
"Después de la cirugía y dentro de las circunstancias, Prichard está respirando por su propia voluntad", dijo Richard en declaraciones publicadas en su cuenta personal en una red social.
"Sólo que ahora le está dando fiebre, producto de un virus que los doctores y enfermeras no saben que lo está produciendo. Hace poco se lo llevaron para realizarle un MRI. Por favor continuemos pidiéndole al todo poderoso por su salud", sostuvo el padre del púgil.
Colón perdió el sábado por descalificación en el noveno asalto ante Williams.
Pero ese alegado error de su esquina pudo haberse convertido en su mayor acierto.
Luego de la pelea, Colón sufrió un desmayo en el camerino y tuvo un episodio de vómitos y mareos, que obligó que fuera llevado de inmediato al Inova Hospital. Allí fue diagnosticado con un sangrado cerebral y operado de emergencia según el propio Richard Colón.
Su promotor, Lou DiBella, también confirmó la información mediante un comunicado de prensa en la mañana del domingo.
"Prichard tuvo varios síntomas en su camerino luego de su pelea con Terrel Williams", explicó DiBella. "Por el momento está bajo el cuidado de los técnicos de emergencias médicas y fue trasladado de urgencia al Hospital Inova Fairfax. Sufrió un sangrado en el cerebro y su estado sigue siendo crítico. La familia de Prichard ha solicitado que se respete su privacidad en este momento".
El peleador de 24 años y que es co-manejado por el promotor Al Haymon, fue derribado dos veces por Williams en el noveno asalto.
La segunda de estas fue debido a una contundente derecha del norteamericano detrás de la nuca del joven boricua quien cayó de bruces a la lona. Posteriormente fue salvado por la campana.
Williams inició su celebración y su entrenador Joe Goosen lo sentó en la banqueta.
Colón permaneció de pie en su esquina a la vez que el veterano entrenador cubano Pedro Luis Díaz Benítez procedía a retirarle los guantes a la vez que observaba su rostro. El padre de Prichard, Richard trató de revivirlo e hidratarlo durante un minuto.
Una vez Díaz Benítez reconoció que aún faltaba un asalto, procedió a colocarle los guantes al boricua, pero el referí Joseph Cooper declaró la victoria de Williams por descalificación.
El lamentable episodio de salud de Colón se produjo antes de que comenzará el combate estelar entre Lamont Peterson y Félix Díaz, como parte del Premier Boxing Champions que tuvo lugar en el coliseo de la Universidad de George Mason.
Williams, que mejoró a 15-0 y 12 nocauts, le propinó el primer revés al boricua.
En Puerto Rico, una gran fanaticada, entre ellos campeones y excampeones mundiales realizaban cadenas de oración en vías de una franca mejoría de Colón quien es uno de varios jóvenes peleadores en ascenso en el boxeo rentado.