(Getty Images)
Garnett y Jamison estarán enfrentados en la zona de postes durante Cavaliers-Celtics
BUENOS AIRES -- Diviértete.
No pretendemos tener poderes de gurú, no poseemos bolas de cristal, no leemos las palmas de la mano.
Diviértete.
No tiramos cartas, no sabemos de tarot, no ensayamos expresión alguna ante la borra del café.
Diviértete.
Que tus pronósticos sean distintos, sean iguales, pero que sean. Que el error traiga tanta desdicha como alegría el acierto y que sigamos cada partido, cada serie, cada minuto, con la energía que esta instancia de temporada merece.
Diviértete.
No busques la puerta de salida, no te aburras pretendiendo saber todo antes de tiempo.
Diviértete.
Con amigos, con desconocidos, o simplemente, a la distancia, conmigo.
Diviértete.
No prometemos campeones antes de jugar, un cien por ciento de aciertos, ni un ticket para viajar en el tiempo con el De Lorean de Marty y Doc.
Simplemente, diviértete. Nada mejor para lograrlo que la adrenalina de la incertidumbre.
CONFERENCIA ESTE
Magic vs. Hawks (Ventaja de campo, Orlando): Sería ilógico pensar que los Hawks pueden vencer al Magic en esta serie de postemporada. Sería ilógico, también, suponer que los partidos de serie regular -Orlando lidera la serie tres juegos a uno ante Atlanta- están destinados a ser un calco de lo que ocurrirá en playoffs.
Pero lo cierto es que los Hawks están, hoy por hoy, con una imagen más deteriorada que en temporada regular.
Veamos: el equipo de Mike Woodson era amplio favorito frente a los Bucks por la simple razón de que Andrew Bogut, el centro estrella de Milwaukee, se había lesionado días antes de la postemporada y por lo tanto, no había un centro de jerarquía para combatir en la pintura con Al Horford, Josh Smith y Zaza Pachulia. Sin embargo, la vergüenza deportiva del roster de Skiles llevó la eliminatoria a siete juegos, con la chance de definir en casa en el sexto.
Es cierto, Atlanta se recuperó a tiempo, pero tras estar 2-0 arriba quedó a punto de mate contra un equipo inferior en calidad. ¿Se imaginan entonces lo que puede hacer el Magic con un centro dominante como Dwight Howard en la pintura? Ni hablar que Orlando fue el único equipo de todos los playoffs que barrió en primera ronda. Por definición, para los Hawks esta llave será tan difícil como hacer equilibrio encima de una moneda de diez centavos.
Veremos una serie entre dos franquicias que disfrutan de la defensa como marca registrada. Pensemos, entonces, lo más importante: ¿Cómo defenderán los Hawks a Howard? Woodson dijo que esperará hasta el día de partido para saber si lo marcará uno contra uno o con doblajes. De las dos formas, Howard aplastó a Atlanta en serie regular, al promediar 21 puntos, 16.8 rebotes y 3.5 tapas por partido. Y más allá del centro estrella, el ataque 4-1 (cuatro perimetrales y un gigante) hace que ante posibles doblajes la rotación de balón le permita tiros cómodos a francotiradores de primera línea.
Algunos pensarán que enloquecí, pero a priori los Bobcats me parecían, para Orlando, un equipo más peligroso que los Hawks. Los partidos se ganan en el rectángulo de juego y no en los papeles, pero los últimos tiempos han dejado algo claro: Orlando es el tipo de equipo que Atlanta no sabe como manejar.
Será, entonces, verdad o consecuencia.
PRONÓSTICO: Magic en cinco juegos.
Cavaliers vs. Celtics (Ventaja de campo, Cleveland): Confieso que he pecado con los Celtics en los pronósticos de primera ronda. Confieso que esperaba menos de ellos y más del Heat, pero la realidad indicó que Boston -pese a sus alarmantes traspiés de irregularidad- fue demasiado problema para un equipo que se quedó sólo en la insinuación.
Ahora bien, ¿Tienen los Celtics lo necesario para dar el golpe ante los Cavaliers? La verdad, no lo creo. Me gustó mucho la intensidad de Boston en algunos pasajes de la serie ante Miami, pero lo que sucederá ahora es distinto; es casi como pasar de una pelea callejera a un mano a mano con el peso pesado más peligroso. Y encima en su propia casa.
Sea como fuere, los Celtics van de punto pero tienen chances. Están atorados en un bosque peligroso pero la brújula aún funciona. Al menos de a ratos. Esta eliminatoria será netamente defensiva, con mucho de la resolución de acciones en la zona de postes.
Los Cavaliers tienen el equipo más profundo de la Liga posición por posición, y será difícil para Boston contrarrestar semejante poderío. Los ojos apuntan a la salud de LeBron James, lesionado en un codo, pero lo cierto es que el astro se encuentra en buenas condiciones para jugar.
¿Cómo deben los Celtics controlar a LeBron? Varios entrenadores han probado sus fórmulas y a excepción de Stan Van Gundy, la mayoría ha sucumbido. Seguramente Boston se jugará por controlar al resto de los jugadores de Cleveland liberando espacio para que James juegue su propio partido. Debería recibir doblajes sólo cuando juegue cerca de la pintura, pero lo realmente complicado es defenderlo cuando inicia como armador, ya que desde el centro es imposible saber hacia dónde puede dirigirse con dribbling. Ya sea solo o en jugadas de pick and roll con Shaquille O'Neal o Anderson Varejao.
La idea de Doc Rivers será, también, controlarlo con Tony Allen y Paul Pierce, y cederle el tiro exterior. En la temporada 2009-10, los números de James indican eso: de cero a cinco pies, tiene un 73.4 por ciento de efectividad (409-557), de seis a diez pies, un 41.1% (44-107), de 11 a 15 pies, un 35.1% (27-77) y de más de 16 pies, un 36.6% (288-787).
¿Qué deben hacer los Cavs? Evitar caer en el embudo que proponen los Celtics y abrir el juego hacia más manos que las de LeBron. Deben intentar jugar mucho debajo del aro con sus internos para lastimar en la pintura y rotar el balón con velocidad buscando penetraciones o tiros a distancia, sobre todo si doblan a James.
En temporada regular, la serie está igualada a dos juegos por bando. Pero aquí, la historia parece estar del lado de Cleveland. Veremos si pueden estar a la altura de los pronósticos o vuelven a trastabillar como en la temporada pasada.
PRONÓSTICO: Cavaliers en seis juegos.
CONFERENCIA OESTE
Lakers vs. Jazz (Ventaja de campo, Los Angeles): "Hoy en la isla ha ocurrido un milagro: el verano se adelantó". Así comienza la novela de Adolfo Bioy Casares, La Invención de Morel. Y así también podríamos calificar el pasaje del Jazz ante los Nuggets en primera ronda de playoffs.
Es cierto que en los pronósticos de primera ronda coloqué al Jazz en seis juegos, pero también es real que el mérito de avanzar fue mucho mayor cuando perdieron a Mehmet Okur por romperse el tendón de aquiles, y no recibieron noticias de mejora de Andrei Kirilenko en el puesto de alero.
Pero si bien ese verano llegó con todo a Salt Lake City, también podríamos decir ahora que el invierno está cerca de ganar terreno con anticipación. Los Lakers vienen de sufrir ante el Thunder y avanzaron en seis juegos gracias a un empuje en el último segundo de Pau Gasol.
Todavía están transpirando aquellos que anticipaban una barrida del equipo angelino.
Ahora bien, ¿Pueden los Lakers quedar fuera de juego frente al Jazz? Debo decir que Utah me sorprendió gratamente, pero, al estar disminuido por lesiones, no creo que tenga lo necesario para golpear a la mandíbula a los Lakers.
El equipo angelino, para conseguir su pasaje, debe imponer su ley en la pintura. Veamos: Pau Gasol, Andrew Bynum y Lamar Odom estarían enfrentados al combo de ala-pivotes de Paul Millsap y Carlos Boozer. Si hacen valer la diferencia de centímetros, la diferencia en la batalla rebotera será crucial.
Phil Jackson tiene tres caminos para defender a Deron Williams (por cierto, ¿Qué tal estará del golpe en el codo que le propinó Chris Andersen en una cortina ciega?): 1) colocar a Kobe Bryant, como hizo ante Russell Westbrook 2) colocar a Ron Artest, ya que Utah no tiene un anotador de elite como podía ser Kevin Durant 3) colocar a Derek Fisher para tener el cruce base-base.
De estas tres opciones, las más saludables son las primeras dos con doblajes 2-1 en los vértices. El Jazz deberá, para tener alguna chance, robar alguno de los primeros dos partidos en el Staples Center y hacer que su localía -uno de los feudos más duros de la NBA- siga siendo una marca registrada.
Utah apostará a su juego grupal y su estructura dinámica en ataque estacionado para derrotar a los Lakers. Esta vez, creo que los campeones corren con una ventaja importante.
Misión cumplida: he llegado al final de este análisis sin nombrar a Kobe en ofensiva. Algo, entonces, debe estar sucediendo.
PRONÓSTICO: Lakers en seis juegos.
Suns vs. Spurs (Ventaja de campo, Phoenix): Las series de Suns y Spurs tienen siempre cuatro características: son atrapantes, divertidas, emocionantes y siempre gana San Antonio.
Y esta vez no veo una excepción a la regla. Los Spurs inflaron el pecho frente a los Mavericks en una eliminatoria que, para la mayoría, lo tenía de punto. Quizás, el error llegó por no poner en la balanza de probabilidades un par de intangibles que ha tenido el equipo de Gregg Popovich cuando su monstruo de tres cabezas luce saludable: experiencia y pasión en este tipo de instancias.
A veces, no todo es blanco o negro. Son los grises los que hacen que este tipo de llaves sean atractivas e impredecibles.
Los Suns son un equipo diferente a sus versiones anteriores de playoffs. En otras palabras, tienen el ritmo de antes pero ahora lo acompañan con una defensa mucho más decente. No estará equivocado quien diga que una versión disminuida de los Blazers le causó algunos problemas, pero a la larga, todas las flechas indicaban al hangar de segunda ronda por una mera cuestión de talento entre ambos planteles.
Mucho de esta eliminatoria tendrá que ver con el trabajo de los bancos de suplentes. Los Spurs han mostrado que su segunda unidad está a la altura de un equipo de campeonato y habrá que ver si Phoenix tiene lo necesario para imponer su ritmo cuando Steve Nash esté fuera por descanso. Si bien el banco del equipo de Alvin Gentry es enérgico, puede sufrir en sectores cercanos a la pintura.
Precisamente, Popovich trabajará su defensa con Nash como blanco. Seguramente será George Hill -quizás la revelación más notable de toda la postemporada- quien siga de cerca al astro canadiense. Los Suns tendrán que impulsar su ritmo para marcar la diferencia, porque en ataque estacionado pueden sufrir en la zona de postes sin Robin López al cien por cien. Nadie duda del talento de Amare Stoudemire, pero la soledad nunca es buena compañera de una estrella de este tipo, tanto en ataque como en defensa.
Habrá que ver cómo decide defender Phoenix a Tim Duncan. Los juegos cuatro y cinco de Timmy D ante Dallas no fueron de lo mejor, pero levantó de manera notable en el sexto. Si Duncan logra establecerse como amenaza en el poste bajo, y sus rodillas no le fallan, la rotacion de balón efectiva puede abrir camino a los tiros de media y larga distancia (léase: Manu Ginóbili, Richard Jefferson, Tony Parker, George Hill, Matt Bonner, Antonio McDyess, etc.).
El juego de pick and roll tendrá un valor fundamental en esta eliminatoria. Si bien Duncan lo juega de la mejor manera en ofensiva con Parker y Ginóbili, es mucho más importante esta acción de ataque estacionado para Phoenix, porque Nash y Stoudemire acostumbran a hacerse un festín con las defensas. La solución es un defensor rápido para Stoudemire que pueda saltar al tiro o penetración de Nash y un buen switch para evitar que Amare reciba en camino directo hacia el aro. No es una empresa fácil, pero si algo a tener muy en cuenta: ya vimos como Phoenix complicó así a San Antonio en serie regular.
Sospecho que esta eliminatoria será pareja al extremo, pero por el momento de ambos, veo a los Spurs mejor ubicados para llegar a las Finales de Conferencia. Sobre todo si logran controlar el vértigo de Phoenix en los primeros dos partidos.
PRONÓSTICO: Spurs en seis juegos.