El campeón de peso pluma Juan Manuel López usa pocas palabras cuando se le pregunta por sus expectativas para su pelea ante el ex campeón en dos divisiones Rafael Márquez: "Mientras dure, será una guerra".
Esa es la expectativa de muchos cuando el puertorriqueño López y el mexicano Márquez choquen en una clásica rivalidad internacional el sábado por la noche (Showtime, 10 ET/PT) en el MGM Grand en Las Vegas.
"Mis expectativas son de que será una pelea candidata a pelea del año", dijo López. "Yo sé que ambos vamos a ir a buscar la pelea y tratar de ganar. Espero que nadie se pierda este combate porque va a ser una de las mejores del año".
López (29-0, 26 KOs), de 27 años, estará hacienda la segunda defensa del título que ganó en enero pasado cuando noqueó a Steven Luevano y lo envió al retiro. López es la estrella en ascenso, un ex campeón de peso pluma Jr. con tremenda pegada, una personalidad abierta y una sonrisa fácil.
Márquez (39-5, 35 KOs), un ex campeón de peso gallo y pluma Jr., tiene 35 años y probablemente está cerca del final de su carrera. Sin embargo, tiene una vasta experiencia, está en buenas condiciones y posee una excelente pegada. Él ha sido extraordinario en algunas de sus batallas. Quizás recuerden ustedes cierta épica rivalidad de cuatro combates que tuvo con Israel Vázquez que concluyó en mayo pasado. Márquez aparenta ser una dura prueba para López, y él lo sabe.
"En los papeles, esta será mi pelea más dura. La pelea contra (Rogers) Mtagwa no lució como su pelea más dura, pero resultó siendo mi pelea más difícil", dijo López sobre su defensa a muerte de su título de peso pluma junior en octubre de 2009. "Por eso uno no puede realmente especular sobre esto. Todo lo que uno puede hacer es prepararse muy bien. Uno tiene que estar en su mejor condición para enfrentar a este tipo de peleadores".
Márquez ganó fama con su serie de peleas ante Vázquez. Ganó el campeonato de peso pluma junior con un nocaut en el séptimo asalto en el primer combate entre ambos en 2007. Pero luego perdió los dos siguientes, primeros por nocaut en seis asaltos a finales del 2007 y luego por fallo dividido en su tercera pelea en 2008, antes de empatar la serie con un nocaut en tres asaltos en mayo pasado. Las peleas 2 y 3 de la serie fueron nombradas como peleas del año. La primera pelea probablemente hubiese sido la pelea del año pero sucedió casualmente en el mismo año en que se hizo la espectacular revancha.
López está familiarizado con las peleas entre Márquez y Vázquez así como con el gran corazón y la potencia de Márquez, por lo cual dice estar listo para ese tipo de pelea dura.
"Definitivamente no va a ser una pelea fácil", dijo López. "Márquez ha estado en algunas guerras, y para eso me estoy preparando yo. Tuve un campamento de entrenamiento realmente bueno en Puerto Rico y luego en Las Vegas. Definitivamente estoy listo para subirme al ring.
"A menudo pienso que si uno noquea a alguien así al comienzo de la pelea entonces la gente no se siente feliz. Espero que esta sea una pelea realmente larga para que la gente pueda verla y disfrutarla".
A pesar de ser el menos favorecido y de la percepción de parte de muchos que dicen que ya ha dejado atrás sus mejores momentos, Márquez está confiado.
"He peleado con tipos con grandes récords antes", dice Márquez, quien tuvo que posponer esta pelea de su fecha original en septiembre porque se accidentó un pulgar al atraparlo con la puerta de su auto. "Si uno sabe lo que hace en el ring y es astuto entonces no habrá ningún problema. Por eso no estoy preocupado por tener un récord perfecto. No creo que pueda confiar en la experiencia para hacer todo. Obviamente tengo más experiencia, pero no estoy apostando mucho a eso. Uno tiene que estar preparado y en buena condición".
En la primera pelea televisada de la noche, el ex campeón semipesado Glen Johnson (50-14-2, 34 KOs) baja de división al peso súper mediano luego de una década en la división más pesada para unirse al Clásico Mundial de Boxeo Súper Seis. Johnson enfrenta a Allan Green (29-2, 20 KOs) en un combate de la Etapa Grupal 3. El ganador avanza a las semifinales a comienzos del 2011 para unirse a Andre Ward, Arthur Abraham y Carl Froch.
Además de los fuegos artificiales del evento estelar, el hecho de que el combate enfrenta a Puerto Rico y México no puede ser soslayado. Es una de las rivalidades más apasionadas del deporte.
"Creo que es la rivalidad más grande del boxeo", dijo López. "Hemos tenido algunas grandes peleas, pero no solamente son las peleas. También hemos tenido algunos grandes boxeadores, algunas verdaderas leyendas. Enfrentar a un tipo como Márquez hace que la pelea sea mucho más grande. Lleva mucho más peso para mí que cualquier otra pelea normal. Esta es una pelea mucho más grande que eso.
"No quiero ponerme una presión adicional, pero entiendo la tradición de los peleadores de Puerto Rico contra los boxeadores que vienen de México. Creo que los puertorriqueños esperan mucho de mí y espero darles la mejor pelea posible. Y yo se que él va a darme todo lo que tenga y que va a ser otra gran pelea de una gran rivalidad".
Las batallas de Márquez ante Vázquez fueron entre mexicanos, pero ahora está peleando con un puertorriqueño, y él entiende el significado.
"Es muy importante porque es Puerto Rico contra México", dijo Márquez. "Es probablemente la pelea más importante de mi carrera. No he peleado con muchos puertorriqueños en el nivel que estoy peleando en esta pelea. Este tipo es muy inteligente y él sabe lo que hace sobre el ring.
"Todo lo que sé es que (Puerto Rico y México) hemos tenido algunos de los mejores peleadores y algunas de las mejores peleas del mundo".
La de este sábado podría ser otra más.