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Desde Rusia con amor

NUEVA YORK -- A seis años de comenzada su carrera como el peso pesado mejor ranqueado por consenso de en las artes marciales mixtas, Fedor Emelianenko, envuelto en los colores blanco, azul y rojo de la Madre Rusia, ofreció un mensaje para sus fans, muchos de los cuales estaban ataviados de la misma manera aquella noche de invierno.

Apoyado en su esquina después de haber sido amartillado en frío por una clásica mano derecha, Andrei Arlovski observaba como Emelianenko se deleitaba con uno de los mejores nocauts del 2009. Nacido y criado en Belarusia, Arlovski entendía cada palabra que salía de la boca de Emelianenko.

No le gustó lo que oyó.

"Emelianenko me derrotó y dijo: 'esta victoria sobre Arlovski fue para todos mis aficionados rusos'. En mi opinión esto estuvo mal", dijo el ex campeón de 31 años de edad de peso pesado de la UFC.

Esos sentimientos estuvieron fuera de base, debido a su trasfondo, dijo Leo Khorolinsky, un ucraniano y manager de Arlovski.

Previo a la pelea en Anaheim, California, los entrenadores de Emelianenko hicieron mención de las raíces de Arlovski. Señalaron que Arlovski, de hecho, no era ruso. Dijeron lo mismo después. El entrenador de Emelianenko desde la infancia, Vladimir Voronov, influenciado quizás por los whiskys de la celebración, se burló de que "Arlovski es de corazón eslavo, y un alma eslava. Arlovski decidió romper con todo [el plan] y lanzarse al ataque, y por eso pagó".

El sábado en el IZOD Center en East Rutherford, Nueva Jersey, Arlovski pelea contra Sergei Kharitonov, quien se describe como "ruso puro." De Arlovski, Kharitonov sugiere que el veloz golpeador "tiene la mentalidad de un americano", ya que pasó gran parte de su carrera profesional en Estados Unidos. Emelianenko ofreció una evaluación similar el martes antes de un encuentro abierto al público en el Roseland Ballroom, donde los ocho luchadores compitiendo en el Strikeforce Grand Prix Mundial de peso pesado respondieron preguntas y posaron para las fotos.

"Él no es ruso, es Belarús", dijo Emelianenko de Arlovski. "Esto es sólo un país diferente. Es un país eslavo".

Cuando se le pidió una reacción, Arlovski dijo "al diablo con Rusia" antes de que él y Khorolinsky rápidamente dijeran que era una broma.

"No creo que Fedor ni Sergei estén calificados para juzgar a Andre," dijo Khorolinsky. "Nunca han estado en sus zapatos. Nunca han llevado el tipo de vida que el lleva. Andre está muy agradecido con los Estados Unidos y por su oportunidad de luchar en su segundo hogar. Pero él sabe de dónde viene".

Compartir la sangre rusa no ha dado lugar a lo mejor de las amistades entre Kharitonov y Emelianenko -- compañeros de entrenamiento que perdieron contacto cuando Emelianenko cambió de representante en el 2003. Khartitonov (17-4) fue elegido como el hombre a defender su gimnasio, Russian Top Team, contra Emelianenko en el torneo de Strikeforce, lo que hizo que esta lucha se lleve a cabo.

"En Rusia sería una situación muy buena si nos encontramos en la final", dijo Kharitonov de 30 años de edad, quien hoy representa al equipo de Golden Glory. "Sería muy bueno para el pueblo ruso ver las artes marciales mixtas".

Sus caminos no se cruzarían hasta la final del torneo, que exige dos victorias para ganar el derecho de ir por el título.

"Si la vida llega a tal punto que tenemos que enfrentarnos, ¿por qué no hacerlo?", dijo Emelianenko, de 34 años, de su compañero de Rusia. Hubo un tiempo en que fuimos realmente muy unidos", dijo Emelianenko. "Pero cambié de representante, empecé a trabajar con Vadim [Finkelstein] y Kharitonov se quedó en nuestro equipo anterior. Tal vez él decidió que era el momento de cortar nuestra relación. Cambió su número de teléfono".

El sábado marca el regreso de Emelianenko a la jaula después de una derrota por sumisión ante Fabricio Werdum el verano pasado. Una victoria ante el brasileño Antonio Silva ofrece una pizca de redención y lo pone en las semifinales contra el campeón de peso pesado de Strikeforce, Alistair Overeem, o contra Werdum, el hombre responsable de su primera derrota desde el año 2000.

Muchos han elegido a Emelianenko para salir triunfador de lo que es sin duda la parte más difícil de la llave del torneo. Kharitonov, Arlovski, Josh Barnett o Brett Rogers luchan para determinar su oposición potencial de campeonato.

Kharitonov-Arlovski es una batalla de peleadores de calidad. El ruso es más un compresor, contento de sentarse en el bolsillo y lanzar golpes de fuego hasta que alguien caiga. El belaruso, perdedor de sus últimas tres, ofrece movimiento y velocidad.

A ambos muchachos les espera una difícil prueba.

"La primera vez que lo vi," dijo Arlovski, "pensé que era es un tipo enorme. No hay duda. Es muy peligroso y va a ser una lucha interesante, difícil".

Arlovski no ha olvidado las palabras de Emelianenko en el ring después de su encuentro en California del Sur. La última cosa que él o Khorolinsky quieren es escuchar a Kharitonov expresar algo similar.

"Vivimos en un mundo global. Este es un deporte global. Seamos atletas, respetémonos unos a otros", dijo Khorolinksy.