MESA, Ariz. -- Bien, juguemos Completa la Oración.
Nosotros deberíamos creer que el Carlos Zambrano nuevo y mejorado del 2011 es diferente del Zambrano nuevo y mejorado del 2010 porque ¿?
"Él está un poco más maduro", dijo el receptor de los Cachorros de Chicago Geovany Soto. "Él tuvo un pequeño problema en el pasado con el tema de la ira. Él lidió con eso. Está tomándose su trabajo mucho más en serio y se está preparando mucho mejor para esta temporada de lo que ha hecho en el pasado. Pienso que él ha aprendido más de sus experiencias pasadas".
Abridor del partido inaugural de los Cachorros Ryan Dempster, es tu turno.
AP Photo/Charles Rex Arbogast
Zambrano rechaza protagonizar dramas este año
"Yo pienso que la gente no se da cuenta de veras cuán buen tipo es él", dijo Dempster, lo más cercano a la conciencia del equipo. "Él es un gran padre. Es gracioso. Extremadamente juguetón. Un gran bromista. Tiene ese lado que la gente no ve. Ellos siempre ven el lado de él destrozando una máquina de Gatorade porque mostramos eso una y otra y otra vez".
Y adelante, inténtelo, gerente general de los Cachorros Jim Hendry.
"Todos estamos esperanzados de que Z finalmente ha llegado a la edad [29] y ha sufrido lo suficiente -- unos cuantos incidentes en su época -- que ha aprendido de ellos", dijo Hendry, quien implementó la práctica del amor firme con Zambrano la temporada pasada. "Yo sé que la gente no cree esto todo el tiempo, pero el 90 por ciento del tiempo, él ha sido muy buen tipo, un buen tipo fuera del parque".
Pero es ese otro 10 por ciento el que debe asustar a los Cachorros.
Todo el mundo quiere creer que Zambrano, el ex número uno en la rotación de los Cachorros, es diferente. Esperen -- no sólo diferente, sino mejor. Ellos quieren creer que Zambrano al fin justificará no tan solo el contrato por cinco años, $91,5 millones que firmó en el 2007 sino, más importante, la paciencia que los compañeros de equipo y la gerencia de los Cachorros le han demostrado a él.
"La razón por la que tienes fe es porque él se tomó un tiempo libre y volvió tan bueno como lo hemos visto en un rato y, entiendo yo, tan relajado como lo hemos visto en un rato", dijo el manager Mike Quade. "Yo apuesto a las carreras de caballos. Me encanta echarle un vistazo a las últimas seis, siete, ocho semanas de un ejemplar. Él se presentó al final de la temporada el tipo que necesitamos y queremos ver. Ése es el único tipo que estoy anticipando ver".
Si yo estuviera asignando favoritos para la Carrera del Gran Z en 2011, yo lo escogería para finalizar fuera de los premios monetarios. Pero no soy lo que usted llamaría un Creyente en Zambrano. He visto demasiados colapsos emocionales en el montículo y en el dugout. He sido testigo de cómo decae su compromiso con el béisbol y cómo sube su peso desde que firmó ese acuerdo millonario. He oído demasiadas de sus promesas anuales por cambiar. Zambrano lidera las Grandes Ligas en la categoría de dar gato por liebre.
Si yo hubiese sido Hendry, hubiera intentado canjear a Zambrano durante el receso de temporada, cuando su marca de 8-0 y efectividad de 1.41 en sus últimas 11 salidas aún estaban frescas en las mentes de los gerentes generales hambrientos por pitcheo. Suma por la vía de la resta.
Pero los Cachorros no forzaron la situación, en parte porque Zambrano tenía una cláusula para vetar un canje, en parte porque ellos no hubieran recibido nada que se acercara al valor equitativo y en parte porque ellos podrían haberse tenido que tragar parte de su salario. Y nadie se atreve a decirlo, pero tal vez ningún otro equipo quería lidiar con los dolores de cabeza por racimos que puede traer Zambrano.
Zambrano no tuvo "pequeños" problemas con la ira, como dijo Soto, sino unos muy públicos. ¿Y alguien de veras piensa que los arranques de Zambrano, usualmente dirigidos a tratar de verse mejor que sus compañeros, estuvieron limitados a lo que los aficionados de los Cachorros vieron en el terreno de juego?
Temprano la temporada pasada, los Cachorros bajaron a Zambrano al bullpen, que es exactamente donde pertenecía. El día después de su "histórico" (palabra de Hendry) berrinche/confrontación en el dugout el 25 de junio del 2010 con el respetado Derrek Lee, Zambrano fue colocado en la lista de suspendidos. Lo próximo fue terapia para controlar la ira. Y funcionó.
O eso esperan los Cachorros, de todos modos.
"Él recibió alguna ayuda el año pasado luego de todo lo que sucedió, y ha estado fantástico desde entonces", dijo Dempster, a quien Zambrano felicitó después de que Quade lo nombró abridor del partido inaugural. "Por tanto, para mí como compañero de equipo y amigo suyo, yo le doy el beneficio de la duda de que ha hecho esos ajustes".
Los Cachorros necesitan a Zambrano tanto como Zambrano necesita a los Cachorros. Necesitan 30 salidas o más y las 188 entradas que les dio entre el 2003 y el 2008, cuando promedió unas 15 victorias por temporada.
Kyle Terada/US Presswire
Zambrano cerró el año pasado con foja de 8-0 y efectividad de 1.41
Él no es el mismo lanzador que era tres años atrás. Los números en el detector de velocidad lo revelan. Pero Soto dijo que el sinker poderoso, el slider y una recta cortada contra los zurdos aún funcionan.
"Él todavía tiene su magia", Soto dijo.
Pero no es su brazo lo que debe preocupar a los Cachorros. Es su cabeza. ¿De veras ha cambiado Zambrano, o estamos aguardando otra detonación de Zambrano?
Los Cachorros no están favorecidos para terminar por encima del tercer lugar, quizás cuartos en la división Central de la Liga Nacional esta temporada -- detrás de los Rojos de Cincinnati, los Cerveceros de Milwaukee e incluso los Cardenales de San Luis sin Adam Wainwright. Pero por otra parte, los Gigantes de San Francisco no eran los favoritos para alcanzar la Serie Mundial y ganarla.
Lo extraño sucede.
Zambrano ha sido parte de lo extraño de los Cachorros en años recientes. Demasiado de eso. Ahora, a ellos les gustaría que él sea parte de un resurgimiento inesperado. Ya basta con las apariciones cada año del club de drama.
"Yo creo mucho en Z", dijo Soto.
"Démosle algo de crédito por regresar, rectificarlo y terminar muy, muy bien -- no sólo por ganar los partidos, sino por la manera en que se manejó y cómo interactuó con sus compañeros de equipo", dijo Hendry. "Ojalá que él logre retomar las cosas donde las había dejado".
Nueva temporada, nuevo Zambrano. Ese es el escenario de ensueño para los Cachorros. Una persona de la oficina de directivos de los Cachorros alabó el espíritu noble, el carácter sensible y la personalidad dulce de Zambrano.
Eso es justo. Quizás yo necesito una nueva perspectiva de Zambrano también.
Así que me acerqué a él en el clubhouse de los Cachorros durante la ventana de 30 minutos para los medios entrevistar a los
jugadores.
"¿Carlos, tienes unos minutos?"
"Debo estirar mi brazo", él dijo, apenas virándose a mirar.
"¿Después?"
"Sí. Tal vez".
Así me siento sobre el Zambrano del 2011.
Tal vez.