LAS VEGAS, NEVADA -- A juzgar por las caras en el pesaje, Timothy Bradley estaba listo para subirse al ring contra Manny Pacquiao desde el viernes. Por su parte, el campeón filipino estaba relajado en la espera del momento cumbre.
"Mi rostro cambiará cuando llegue la hora de subir al ring. Por ahora estoy feliz. Sonriente", dijo Pacquiao tras fijar la báscula en 147 libras para la pelea de la categoría welter en la que expondrá su corona de la Organización Mundial de Boxeo por quinta ocasión aparte que expondrá un invicto que tiene durante los pasados siete años y que suma un total de 15 victorias.
Es la primera vez en su carrera que Pacquiao fija el peso en el límite máximo de la categoría. Solo una vez en su ilustre campaña boxística ha peleado más pesado y ello fue cuando marcó 150 para su combate en la categoría Súper Welter en noviembre 12 de 2010 ante Antonio Margarito, en la que conquistó la corona del Consejo Mundial de Boxeo de dicha categoría para convertirse en el único peleador en la historia en haber ganado campeonatos mundiales en ocho divisiones.
Para ninguna de sus previas cinco peleas en la categoría welter Pacquiao se había acercado ni siquiera a las 147 libras. Ante Oscar de la Hoya en el 2006, su primera en la división, fijó la pesa en 142 libras. Luego ante Miguel Cotto pesó 144, ante Joshue Clottey 145, ante Shane Mosley 145 y ante Juan Manuel Márquez el pasado 5 de noviembre cargó a la pesa solo 143 libras.
Pacquiao había dicho la semana pasada en su entrenamiento público que esta vez comió más para poder tener más peso. No empece a las libras, su físico lucía cortado muscularme el viernes aunque jamás capacitado para ser comparado al de Bradley, quien realizará s debut en la categoría welter con un peso de 146 libras.
Con músculos hasta en sus pómulos, Bradley exhibía como siempre estar bien preparado físicamente y con cara de guerrero listo para la pelea de su vida. Así lo repitió tras el pesaje.
"Estoy listo para la guerra", dijo Bradley entre abucheos de seguidores de Pacquiao que aunque hicieron su ruido no fueron tan impresionantes como ha sido costumbre en las pasadas peleas del Pacman.
"No importa cuando me abucheen, no me afectarán. Esa gente que abuchea no podrán subir con Manny Pacquiao al ring mañana. No me molestan en nada. Estoy programado y decidido a probarles a todos que están equivocados. Estoy con hambre y determinado a ganar. Mi cuerpo es la mejor evidencia".
Ante el cuadro dispar de rostro de guerra y semblante de paz, Bradley le hizo una expresión a Pacquiao con mirada fija en sus ojos cuando ambos posaron por última vez frente a frente tras el pesaje. Y el filipino le devolvió una sonrisa.
"Solo sonreí. Estoy feliz. No sé por qué él está tan serio", dijo Pacquiao, reconociendo que su rival tiene hambre de alcanzar la grandeza del deporte pero asegurando que él también conserva la misma hambre de siempre por salir del ring con los brazos en alto.
En la tarde de pesaje, a la cual acudió una multitud adecuada que no llenó a capacidad las sillas que fueron dispuestas para los fanáticos, otros 14 peleadores también fueron pesados. Fueron los protagonistas del cartel de ocho combates que comenzará a ser televisado a partir de las 9:00 p.m. en el Este y 6:00 p.m. en el Pacífico este sábado, aunque el combate estelar será llevado al aire una vez concluye el séptimo juego de la Serie Final de la Conferencia del Este de la NBA entre los Boston Celtics y el Miami Heat.
Para la semiestelar el mexicano Jorge 'El Travieso' Arce y el puertorriqueño Jesús Rojas fijaron la báscula en 123.5 libras cada uno. En tanto, Mike Jones pesó 146.5 y Randall Bailey 146 para la antepenúltima pelea del cartel. Por su parte, Teon Kennedy y el cubano y campeón mundial peso Súper Gallo de la Asociación Mundial de Boxeo, Guillermo Rigondeaux, pesaron ambos 122 libras.
Esas serán las cuatro peleas que formarán parte del 'pague por ver' de HBO.