Jeffri Chadiha 10y

Decepciona que Suh no acompañe a los los Lions en trabajos voluntarios

ALLEN PARK -- El aspecto más preocupante de la ausencia de Ndamukong Suh del programa voluntario de temporada baja de los Detroit Lions no es que no está ahí. Es que se trata de un equipo que no tiene el coraje para cuestionar con fuerza esa decisión. Se trata esencialmente un ejemplo más del por qué esta franquicia ha disfrutado apenas dos temporadas ganadoras en los últimos 16 años. También se trata de la primera indicación de que los aficionados a los Lions probablemente deban prepararse para más decepciones en el otoño entrante.

La defensiva predecible en respaldo a Suh --quien no se ha unido a su equipo desde que comenzaron los trabajos voluntarios desde la semana pasada-- es que las sesiones no son obligatorias. El tres veces tackle defensivo de Pro Bowl no ha participado en dichos eventos en el último par de años, así que no debe ser un gran problema ahora, o al menos eso se dice. Cuando se le preguntó acerca de ello, el mariscal de campo Matthew Stafford dijo esperar que Suh se encuentre "en gran forma" cuando sea que el equipo inicie sus sesiones obligatorias y los minicampamentos. El presidente de los Lions, Tom Lewand, y el nuevo entrenador en jefe, Jim Caldwell, fueron un paso más allá, diciendo que Suh se podría beneficiar de estar rodeado por sus compañeros, pero nada de lo que dijeron puede ser confundido con frustración.

Lo que nadie estuvo dispuesto a decir es lo que es dolorosamente obvio para cualquiera que siga de cerca a esta situación: dice bastante el hecho de que Suh eligiera no presentarse a estas sesiones. Aún si se está poniendo en una forma fenomenal por su cuenta, era la primera oportunidad para que Caldwell y sus asistentes educaran a sus jugadores sobre los nuevos esquemas ofensivo y defensivo. Si Suh no enloquecía respecto a las filosofías del equipo respecto a fuerza y acondicionamiento, al menos podría haberle encontrado lo positivo. Son el tipo de gestos que hacen los líderes con el objetivo de crear una atmósfera ganadora.

La falta de molestia alrededor de los Lions sugiere que se trata de un equipo que se ha acostumbrado demasiado a darle la vuelta a su mayor estelar defensivo. Ellos seguramente entienden que las actuales negociaciones contractuales de Suh podrían ser factor para su ausencia, lo que es justo. Pero también deben percatarse de que el cambio de la cultura perdedora del equipo no sucederá solo simplemente al asumir una actitud pasiva hacia lo que debe ser una situación molesta. No necesitan solamente que Suh llegue a Pro Bowls. Necesitan que ayude a construir una base sostenible para el éxito.

No es como si los Lions hubieran alcanzado un punto en que pueden operar como equipos que de hecho pelean campeonatos. Por ejemplo, no fue un problema mayor cuando el ex apoyador de los Chicago Bears, Brian Urlacher, se perdió algunas sesiones voluntarias en el 2008 mientras peleaba una extensión contractual, mientras el entrenador en jefe Lovie Smith apuntaba que necesitaba a todos sus jugadores disponibles para esas sesiones. Pero Urlacher también había guiado a esa franquicia a varios partidos de postemporada y un Super Bowl para ese momento. Se había ganado el derecho a desaparecerse y los Bears habían establecido un estándar que los jugadores jóvenes sabían que debían seguir. Ellos podían sobrevivir un par de temporadas sin su líder en el vestidor.

Los Lions no cuentan con ese lujo. Han tenido una aparición de postemporada desde la llegada de Suh como el segundo recluta global en el draft del 2010, una derrota en la Ronda de Comodines ante los New Orleans Saints durante la campaña del 2011. La imagen de Suh alrededor de la liga también ha sido un problema durante la mayor parte de los últimos tres años. Ha sido suspendido en una ocasión, multado con casi 217,000 dólares y también acusado por el analista de Fox, Heath Evans, de ser "incontrolable" en el vestidor de Detroit. Evans dijo que tres jugadores de los Lions le dieron la primicia.

La decisión del equipo de votar a Suh como capitán del equipo debió ser punto de inflexión en su carrera. Claramente, codiciaba el papel, un deseo que sugirió la posibilidad de que estaba preparado para la responsabilidad. Son la clase de cosas que deberían estar discutiendo los Lions cuando hablen de su ausencia de estos entrenamientos. Desesperadamente querían que liderara a este equipo el año pasado, y ahora está enviando un mensaje totalmente diferente con esas acciones.

Si las sesiones voluntarias no fueran un tema importante, entonces también Stafford estaría entrenando por su cuenta. El receptor abierto de Pro Bowl, Calvin Johnson, también podría haber dicho "paso", junto con cualquier otro jugador que tuviera suficiente potestad para hacer lo que deseara. Junto a Suh, Stafford y Johnson son los jugadores más importantes en la plantilla de los Lions. Ellos asistieron porque saben que se trata de algo que simplemente ponerse en forma para la temporada.

Esos jugadores se presentaron porque se percatan de que es otra oportunidad para que los Lions cambien su cultura. El ex entrenador en jefe, Jim Schwartz, perdió su empleo después de la temporada pasada una vez que se volvió aparente que no podía sostener el momento luego del éxito del 2011. El equipo contrató a Caldwell con la esperanza de que pudiera proveer la misma calma que le ayudó como entrenador de mariscales de campo y entrenador en jefe de los Indianapolis Colts, y como coordinador ofensivo de los Baltimore Ravens. Entre más rápido compren los Lions el mensaje de Caldwell, mejor serán sus oportunidades de ascender a nuevas alturas.

En lugar de ello, Caldwell pasó la temporada pasada diciendo a reporteros locales que se vio "sorprendido" por la ausencia de Suh. Añadió que había hablado en varias ocasiones con Suh, e indició que había un límite respecto a lo que podía hacer un entrenador con un programa de trabajo voluntario. De hecho, Caldwell podría hacer un poco más. Podía hablar de lo crítico que es aprovechar el tiempo y cómo la mayoría de jugadores en Indianapolis y Baltimore --donde Caldwell fue parte de equipos ganadores de Super Bowl-- comprendieron eso.

Quizás Caldwell no está listo para empezar una disputa pública con un jugador. Su personalidad sugiere que prefiere trabajar detrás de escena y mantener todos los problemas dentro de casa. Pero también es difícil creer que no está más molesto por la decisión de Suh de ausentarse a estas sesiones. Si el reporte en Fox respecto a Suh socavando a Schwartz es preciso, sólo es cuestión de tiempo antes de que Caldwell enfrente problemas similares durante su mandato.

También vale la pena notar que los jugadores en la liga de hoy no se ven obligados a invertir tiempos irracionales con sus equipos durante los recesos de temporada. El último contrato colectivo de trabajo determinó que los entrenadores tienen un límite hasta dónde pueden exigirle a los jugadores en estos meses. El beneficio es que los jugadores tendrán más tiempo para dedicarse a sí mismos y mayores libertades para trabajar con sus propios entrenadores. Al final, contarían con más tiempo para hacer lo que desearan a lo largo de la primavera y el verano.

Aparentemente, Ndamukong Suh planea en hacer lo que quiere hasta que absolutamente tenga que estar con sus compañeros. Eso es una postura aceptable para un jugador que ha disfrutado del éxito en postemporada o que es capaz de presumir al menos un anillo de Super Bowl. Pero para un estelar tan joven como Suh, suena mucho a un jugador que no sabe lo que se requiere para ganar. Y la parte más triste de todo es que la gente a su alrededor no está dispuesta a recriminarle eso.

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