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Historias mínimas

Como es habitual, en ESPNtenis.com repasamos las historias paralelas de la semana tenística. Detalles, curiosidades, frases destacadas y todo el color del circuito.

Mantener la esencia... pero cada dos años
No quedan dudas de que hay cosas para mejorar en la Copa Fed: pasan años sin tenistas de renombres, jugadoras que renuncian a la mismísima final y, de un momento al otro, aparecen nombres como los de Serena y Venus Williams jugando en Grupo Mundial... II.

Mary Joe Fernández, protagonista en tres finales del Grand Slam (además de dos títulos de este calibre pero en dobles), es palabra autorizada como capitana de Fed Cup de los Estados Unidos, luego de ganar la competición, como jugadora, en dos ocasiones.

La nacida en Santo Domingo descarta un formato amalgamado en una única semana y sede por año, pero que jugar todas las temporadas es desgastante: "Me encanta la competición, que se juegue por equipos, por países, tanto en casa como fuera de casa. A los países más pequeños los beneficia este tipo de competiciones", le respondió a ESPNtenis.com, en su visita a Pilar para enfrentar a Argentina.

"Se puede mejorar, jugando cada dos años o, al menos, no haciéndolo en años de Juegos Olímpicos. Es difícil que estén todas siempre porque los torneos WTA se juegan todas las semanas y es complicado tener un momento para la Fed Cup". No es la primera voz que defiende el formato a rajatabla pero que prefiere que tanto el torneo femenino como la Copa Davis sean bienales. Cualquier cambio, dependerá de la ITF, que este año sonríe porque los mejores del mundo hacen los deberes para estar en Río 2016...

Un tercer tiempo coqueto
La visita de las Williams a Argentina siguió dejando anécdotas. Como sucedió con María Irigoyen que, tras su partido ante Serena, el sábado, cruzaron unas palabras. "Hicimos el regenerativo juntas. Le pregunté cómo hacia para no estar arrugada. Y me dijo que su piel negra no se arruga, que no le gusta usar cremas", comentó en conferencia de prensa, entre risas, dejando bien de lado lo deportivo para meterse en otra obsesión de las mujeres. Además, dejó una puerta abierta de cara al futuro: "Me dijo que ama a Argentina, ama a la gente y que va a volver". ¿Será para jugar o para un simple paseo?

El joker, el circo y la bandera
El quinto festejo de Novak Djokovic en Australia dejó mucha tela para cortar, tanto por lo deportivo como por lo periférico: la "crisis de 20 minutos" del ganador, la espectacular recuperación en el cierre y la "sorpresa" que se llevó Andy Murray por los avatares físicos del serbio.

Entre aquellas voces que pusieron en primer plano el vaivén de Djokovic en cancha, aparecieron Martina Navratilova y Mats Wilander, este último ya desde su rol de comentarista en la señal Eurosport. Pero en suelo serbio, sus dichos tuvieron un eco singular...

"Deberían estar avergonzados. Lo que dijeron no tiene nada que ver con el deporte", salió al cruce Bogdan Obradovic, capitán del equipo serbio de Copa Davis, en diálogo con el diario Novosti. "Me parece que lo que les molesta es que venga de un pequeño país como Serbia", remató.

Y detalló: "Este trofeo está en nuestras manos y dice Serbia. Lo único que pueden hacer es odiarnos. Nosotros nunca lo hicimos, simplemente luchamos contra aquellos que nos atacaron. No hay nación más bella y más inteligente que la nuestra. De Tesla a Djokovic, hemos mostrado lo que somos capaces de hacer. Somos una fábrica de campeones y no vamos a parar".

Pero Obradovic fue mucho más allá ante la figura de Wilander y desafió: "Debería dejar su lugar en Eurosport. No es la primera vez que es rudo con Novak. Además, si compitiera en esta época él sería un jugador tipo Dolgopolov, sin chances de ganar un Grand Slam".

Federer sí, el resto no
Otra historia que se prolongó desde los últimos días de Melbourne involucró al suizo Marc Rosset, compinche de Roger Federer en sus años de circuito (llegó a ser N°9 del mundo) y sin demasiados pelos en la lengua a la hora de declarar.

En diálogo con el periódico suizo Tribune de Geneve, Rosset disparó contra el actual momento del tenis y el sistema que aplican los Grand Slams, combatiendo "el problema de los 32 sembrados": "Por este motivo los mejores no necesitan grandes esfuerzos en las primeras rondas y llegan a cuartos con 10 días de entrenamiento improductivo".

"Además creo que los jugadores jóvenes aún están lejos de ganar un Major -siguió-. No me gustó nada la actitud de Nishikori contra Wawrinka y a Raonic lo veo bastante limitado fuera de su servicio".

Pero el título más fuerte llegó a la hora de analizar lo que fue la final de Australia: "Ante los Djokovic-Murray uno se aburre. Pueden jugar 50 veces que va a ser siempre lo mismo. Con Federer siempre hay algo nuevo".

Jaziri, de nuevo el centro de la polémica
Octubre 2013. Malek Jaziri debe jugar en cuartos de final del Challenger de Tashkent ante el israelí Amir Weintraub, pero el tunecino decide no presentarse luego de recibir un mail de su propia federación que le ordenaba, como protesta del régimen árabe ante el conflicto bélico en la Franja de Gaza, no salir a disputar el encuentro. Tras una investigación, se eximió de responsabilidad al tenista -adujo una lesión en una rodilla- pero la federación fue sancionada con un año sin Copa Davis.

La posterior actividad de Jaziri le puso aún más condimentos a la historia. Dos semanas después firmó cinco victorias en línea y se quedó con el Challenger de Ginebra, en Suiza. A decir verdad, la coartada de la dolencia física se hizo humo una vez que la ITF ya se había expresado al respecto.

Febrero 2015. Malek Jaziri domina al uzbeco Denis Istomin en primera ronda del ATP de Montpellier. El tunecino se queda con el set inicial por 6-3 y comienza a mirar de cerca la segunda ronda. ¿Su próximo rival? Dudi Sela. 18 meses después el antecedente mencionado recobra importancia. El tunecino se retira de su partido y así evita enfrentarse a un tenista israelí, país que aún mantiene el conflicto con Palestina.

"Mi teléfono está apagado. No he recibido órdenes ni presiones. Estaba jugando con Denis (Istomin), que no es pan comido", explicó Jaziri en declaraciones a L'Equipe. Y agregó: "No me había fijado en mi próximo rival. Tengo una lesión en un codo desde el Abierto de Australia y sólo he golpeado la bola una vez en los últimos ocho días. Hay que ser inteligente en esos casos porque vienen algunos torneos importantes y no quiero agravar el problema".

Pero el tema no quedó sólo en su retiro que frustró el supuesto partido con Sela, sino que Jaziri además estaba participando del evento en dobles y, junto a Marc López, ahí sí ya tenía definido como rival al israelí Jonathan Erlich, en dupla con el checo Frantisek Cermak. Obviamente, siguiendo la línea de su dolor en el codo, no se presentó.

Con los antecedentes, ATP comenzó una investigación por el retiro y una de las primeras voces en escuchar fue la del fisioterapeuta que atendió dos veces a Jaziri durante el partido ante Istomin. "Teniendo en cuenta el incidente previo, estamos estudiando las circunstancias dadas como una cuestión de prudencia", le explicaron desde ATP a la agencia AP.

Con este panorama, la cadena Al Jazeera se contactó con la federación tunecina de tenis para conocer su posición. No obstante, aprendiendo de los errores del pasado y no queriendo frustrar su vuelta a la Davis para septiembre en el Grupo III de África, desde el ente no quisieron hacer ningún comentario al respecto.

Esta vez, la historia parece que quedará como una anécdota más y a la espera de un tercer episodio.

Problemas de equipaje
La reciente actividad en la Fed Cup tomó una transcendencia que rara vez tiene a raíz de los nombres propios. Con la proximidad de los Juegos Olímpicos, con la obligación de cumplir normas para poder estar en Río de Janeiro 2016, las mejores del mundo se dieron cita a la competencia por equipos.

Así, entre otras, se dieron los regresos de Serena Williams, Maria Sharapova y Victoria Azarenka. La estadounidense fue el centro de atención en una serie con grandes contrastes en Buenos Aires, donde volvió a dejar algunas dudas con su salud; la rusa condujo a su país a una gran victoria en Polonia, de visitante, para avanzar a semifinales por octava vez en nueve años; y la bielorrusa festejó el hecho de ganarse un lugar en los playoffs para el Grupo Mundial II.

Sin embargo, no todo fue color de rosa para Vika. Ella llegó a Budapest a tiempo, como el resto de sus compañeras. Su equipaje no. Azarenka estuvo sin sus raquetas y ropa durante los primeros tres días en Hungría e incluso se perdió la serie ante Georgia por esa razón. Su ausencia y el porqué tomó relevancia. Una verdadera mancha para la empresa aérea. Al siguiente día, Vika ya estaba con sus elementos y en cancha.

Una situación similar vivió Ivo Karlovic en su viaje a Memphis para jugar esta semana. Tuvo que tomar tres vuelos para llegar, y sus valijas quedaron en el camino. Mientras espera el arribo de las mismas, el croata le pidió ropa prestada a su compatriota Ivan Dodig, con quien lo separan 28 centímetros de diferencia. Y la verdad, no salió favorecido con los pantalones.