ROMA (EFE) -- Una serie de delicados y complejos ajustes contables en el balance del Roma, que próximamente realizará una ampliación de capital, han provocado que el defensa argentino Walter Adrián Samuel no sea oficialmente nuevo jugador del Real Madrid hasta julio.
La fecha tiene mucho que ver con el cierre del balance económico de la temporada 2003-04, el 30 de junio, que se prevé con números rojos, pérdida que se une a la cuantiosa deuda del Roma, que ya tiene en marcha un plan de reestructuración financiera.
A esta circunstancia se añade que el club desería incluir en el balance de la temporada 2004-05 los 25 millones de euros (30 millones de dólares) del traspaso de Samuel, en especial el primer pago.
Lo curioso es que mientras el Roma, en su obligatoria información al mercado bursátil (cotiza en la Bolsa de Milán), afirma que los 25 millones serán abonados en tres plazos, el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, dijo ayer, lunes, que se pagarán en cuatro anualidades.
En el contrato se establece que el traspaso de Samuel al Real Madrid será efectivo a partir del 1 de julio.
Pero, toda vez que el jugador está en dicho periodo en la Copa América de Perú con Argentina, el club madrileño se ha protegido de una posible lesión no sometiéndole ayer, lunes, a la esperada, y pertinente para toda firma, revisión médica.
Esta se efectuará a la vuelta de la Copa de América y será entonces cuando el traspaso se haga efectivo formalmente.
El Roma atraviesa una grave crisis financiera, con una deuda superior a 400 millones de euros, y con la necesidad de sanear su economía para poder inscribirse en el próximo campeonato.
A fin de afrontar esta crisis y una vez fracasado el acuerdo de venta a una financiera rusa del paquete mayoritario de acciones en poder de la familia Sensi, el club encargó un plan de reestructuración financiera.
Este plan prevé la venta de buena parte de las propiedades inmobiliarias de la familia Sensi (su patrimonio cuenta con 60-70 empresas); la ampliación de capital de la sociedad y el ajuste del balance con el traspaso de algunos jugadores.
El aumento de capital, aprobado el pasado abril y que debe ser suscrito antes del 31 de julio, será de 150 millones de euros, de los cuales la familia Sensi suscribirá 44,3 y el resto será colocado en el mercado.
Antes del 31 de mayo, el Roma precisa 74 millones de euros para su continuidad, que se esperan obtener mediante la venta de los inmuebles de la familia Sensi (entre ellos un céntrico hotel romano) que fueron puestos como aval para solicitar fondos a los bancos.
Después, con fecha límite del 10 de junio, será fijado el valor de las acciones del Roma que serán colocadas en la ampliación.
Además, antes del 30 de junio, para poder lograr la inscripción en el próximo campeonato, el Roma debe abonar 93 millones de euros, correspondiente a sueldos atrasados (se dice que faltan por pagar a la plantilla las mensualidades de febrero, marzo y abril), deudas con la Liga Profesional y de otro tipo (a clubes, etc.).
El Roma espera cubrir dicha cantidad con los 78 millones relativos a los derechos televisivos y de patrocinio, y con 15 (cantidad prevista como desequilibrio financiero al término del ejercicio contable) procedentes del saldo por operaciones contables.
Antes del 20 de junio, la sociedad debe abonar 27,1 millones de euros en impuestos (los otros dos plazos son de 24,8 millones de euros el 18 de octubre; y de 27,7 millones de euros el 27 de noviembre).
Para el futuro, los 25 millones de euros (30 millones de dólares) de la operación Samuel representarán una importante plusvalía (diferencia entre dinero pagado y el adquirido por su venta), pues el club abonó en su día al ficharle unos 18 millones de dólares.
EL club confía en inscribir la plusvalía de 12 millones de dólares en los balances de la próxima campaña. El plan de ingresos se completaría con el traspaso del centrocampista brasileño Emerson.