DALLAS -- Ningún mal dura 100 años, reza el refrán. Y para los Charlotte Hornets sólo duró 14 partidos.
Los Hornets consiguieron su primera victoria en Dallas sobre los Mavericks desde 1998, cuando la franquicia incluso vivía en New Orleans.
El partido estuvo cerrado durante tres cuartos y como similar a lo que sucedió el pasado martes, los Dallas Mavericks fueron arrollados al final del partido.
Los Mavericks estaban abajo por un punto (58-57) a principio del tercer periodo, cuando los Hornets despegaron con una racha de 13-2 y ya nunca voltearon para atrás.
Los Mavericks nunca encontraron la manera de contener a Al Jefferson, quien se despachó con 31 puntos e hizo lucir mal al centro de los Mavericks, Zaza Pachulia.
Los Hornets ganaron 108-94 en un repleto American Airlines Center, que vio la segunda derrota consecutiva, en igual número de partidos en casa esta temporada para los anfitriones.
Aunque los números de Pachulia suenan mejor, con su tercer doble doble de la temporada (14 puntos y 10 rebotes), quizá Dwight Powell fue quien mejor compitió con Jefferson abajo del tablero por parte de Dallas.
Powell fue uno de tres Mavs con 14 puntos, junto a Pachulia y Dirk Nowitzki, además de que sumó nueve rebotes desde la banca.
Nowitzki jugó 18 minutos y se convirtió apenas el jugador 16 en la historia de la NBA que supera los 45 mil minutos sobre la duela.
Pero salvo esos destellos esporádicos y las marcas que impone Nowitzki cada vez que se para en la cancha, los Mavericks fallaron de ambos lados de la duela, al defender y atacar.
“Si queremos jugar mejor, tendremos que comenzar mejor y aprender a cerrar partidos”, dijo el entrenador de los Mavericks, Rick Carlisle. “Para tener éxito hay que jugar partidos completos y nosotros no lo hemos hecho”.
El entrenador Rick Carlisle, quien de manera oficial firmó un alargue contractual que asegura su estancia al menos hasta el 2021, probó los 15 minutos que puede jugar a su delantero Chandler Parsons en la segunda mitad.
Pero salió peor, que en los dos partidos anteriores cuando Parsons, convaleciente de su operación de rodilla, disputó al menos 11 minutos, ya que este jueves apenas anotó dos unidades y se apuntó un rebote.
“Fue casi como si los ‘dioses del basquetbol’ hubiera dicho, aquí vamos a echar a perder esa tonta idea”, dijo Parsons visiblemente molesto. “Tengo que hacer mejor trabajo. Mi rodilla no es pretexto para lo que hoy hice sobre la cancha”.
Deron Williams estuvo 28 minutos y anotó 15 puntos, mientras que Wesley Matthews estuvo 26 sobre al duela para 11 puntos.
“Cada vez me siento mejor”, dijo Williams. “Creo que nos falta cohesión sobre la duela. Es normal, muchos nunca habíamos jugado juntos y es apenas el quinto partido de la temporada. Vamos a estar bien, pero hay que comenzar a apurarnos”.
De cualquier manera, la historia estaba escrita con Jefferson casi imparable, secundado por Marvin Williams y sus 17 puntos con 12 rebotes para los Hornets.
“Tenemos que venir aquí con un propósito”, dijo Matthews. “Es temprano, pero tampoco es bueno que dos partidos en casa se conviertan en dos derrotas por dobles dígitos. Es inaceptable”.
Los Mavericks recibirán su tercer partido consecutivo, a la búsqueda de su primera victoria en Dallas este sábado frente a los New Orleans Pelicans.
Los Hornets viajarán a San Antonio para enfrentar a los Spurs este mismo sábado.