<
>

Tri, en la Copa, ¿un lobo con piel de oveja?

LOS ÁNGELES -- Revelada la lista de la Copa América, sobresale el pelotón de la Copa Oro. Se prioriza la asistencia a la Copa Confederaciones. Las obligaciones, en México, se cotizan mejor que las aventuras. En guerra anunciada, no hay soldado muerto, y Miguel Herrera no quiere desfallecer antes el Mundial de Rusia.

En la lista de El Piojo para Concacaf aparecerán Guillermo Ochoa, Paul Aguilar, Héctor Moreno, Maza Rodríguez, Diego Reyes, Miguel Layún, Andrés Guardado, Héctor Herrera, Jonathan dos Santos, Gallito Vázquez, Giovani dos Santos, Chicharito Hernández, Tecatito Corona, Carlos Vela, Oribe Peralta, Jonathan Orozco, Moisés Muñoz, y otros más que garanticen el medio boleto para ese duelo extra ante EEUU. Hay pocos misterios ya.

Se había comentado que México enviaría a sus mejores suplentes como base a la Copa América. La banca del Tri en la Copa Oro será una mezcla de selección B y C.

¿A qué se aspira en Copa América? Recordemos antecedentes. A la pasada edición de esta competencia, llegaron a semifinales tres equipos que no fueron al Mundial 2014 (Perú, Venezuela y Paraguay), y el cuarto, el campeón Uruguay, sólo se arrimó a Brasil gracias a la infamia arbitral en la repesca ¡y ante Jordania!

Argumentan, desean, anhelan, que en esta edición, Argentina con Messi, Brasil con Neymar, y el anfitrión Chile con Alexis, además de Colombia con James y Ecuador con Valencia, se conviertan en genuinos protagonistas, y que estos cinco no sean de paso efímero como en la edición de 2011. En la teoría, así debe ser.

La lista de México puede ser despreciada, pero no es despreciable.

Subrayemos algo: carente de figuras mundiales, carente de superdotados, el Tri debe aspirar, debe forzar, debe convencerse que con testosterona, resistencia, devoción y juego de conjunto, sólo así, será capaz de equilibrar ante las constelaciones de desequilibrantes.

Ojo: en el uno a uno, en el jugador por jugador, en el comparativo, en la balanza de futbolista a futbolista, México pierde desde la convocatoria. Y queda eliminado desde el sorteo. Y desde antes del silbatazo, hay que empezar a entonar el Cielito Lindo.

Pero, insisto, con los valores agregados mencionados, fue capaz de sobrevivir a Brasil, de someter a Croacia, y de quedarse --como siempre--, ante Holanda, en el catálogo eterno de ya merito.

Más allá de los pasajes de nandrolona y clembuterol, y otras yerbas en selecciones nacionales, la auténtica droga que sublima al jugador mexicano es la camiseta, el Himno, y, por supuesto, esa hambre acumulada e insatisfecha por una conquista suprema entre los torneos adultos, como Copa América, de la cual ha sido dos veces finalista, y claro, más allá de su mayor satisfacción que ha sido el oro en los Juegos Olímpicos de Londres.

Como siempre, la convocatoria de seleccionados es cuestionable y cuestionada. En un país con 130 millones de técnicos, el entrenador en turno, en este caso El Piojo Herrera, siempre será tratado como el más ignorante, con un conocimiento de futbol por debajo de los 129,999,999 estrategas restantes en México. El técnico del Tri, según el juicio popular, siempre es el más burro de la clase.

¿Qué hace Vuoso? ¿Cinco goles y tres asistencias con Jaguares? Siempre he pensado que un país debe ganar lo que merezca con lo que su raza, su suelo, su sangre, su mestizaje, su idiosincrasia, sean capaces de entregarle. El extranjero y el naturalizado serán bienvenidos en todas las demás áreas importantes, porque hay genios en las artes y en las ciencias, pero esto es futbol, es un pasatiempo, un apasionamiento, una herencia lúdica entre ganar y perder en 90 minutos.

Aclarado pues, el porqué del rechazo a Vuoso, lo justifico, entendiendo a El Piojo: es un jugador que en el ocaso empieza a pagar deudas de todo lo que debió ser en otros pasajes. Es más lucha, más liderazgo, más astucia y fuerza bien dirigida. A final de cuentas no desplaza ni a Eduardo Herrera ni al Paleta Esqueda. ¿Opciones? Omar Bravo y Aldo de Nigris, en especial el primero, a mi juicio, ojo, no el mejor futbolista del torneo, pero sí el mejor jugador de futbol del torneo, entendiendo las diferencias entre los dos especímenes.

¿Le desagrada, le decepciona esta formación? Corona, Flores o Aquino (no se sorprenda), Salcedo, Márquez, Ayala, Domínguez, Güemez, Medina, Montes, Tecatito Corona y Raúl Jiménez o Paleta Esqueda. ¿Se sorprendería viendo a Marco Fabián en lugar de Domínguez? Lo permitiría una media cancha muy sólida como la mencionada de Güemez, Medina y Montes.

Recuerde que en primera fase, México sólo necesita una victoria que le coloque como uno de los dos mejores terceros lugares. Bolivia puede ser esa piedra de apoyo. Chile y Ecuador tienen sin duda jugadores con mayor calidad.

El problema empieza en los Cuartos de Final. Ahí, si avanza como mejor tercero iría contra el mejor del Grupo B: ¿Argentina o Uruguay? Ya para entonces Messi estará recuperado del ajetreo con el Barcelona, y Tévez y Agüero están intratables.

La inevitable realidad es el choque de intereses. Y, lo habíamos comentado, el Tri, Miguel Herrera, la FMF, los dueños de la selección, deciden irse de Copas con la más rica y rentable, la Copa Oro, aunque la más deseable, voluptuosa y seductora, sea la Copa América.

Dice un popular refrán colombiano, cortesía del decano del periodismo cafetero, Óscar Restrepo: "El que no tiene para más, con su mujer se acuesta". Y la mujer del Tri, infiel, perjura, ingrata y voluble a veces, sigue siendo la Concacaf.