Primero Marco Estrada perdió su juego perfecto. Y luego perdió la oportunidad de llevarse la victoria.
Estrada retiró los primeros 22 bateadores a los que se enfrentó hasta que Logan Forsythe le conectó un sencillo dentro del cuadro que terminó con su perfección con un out en la octava entrada en el partido en el que los Azulejos de Toronto se midieron a los Rays de Tampa Bay el miércoles. El intento de Estrada de terminar su partido sin hits duró un out más que su salida anterior, el pasado viernes ante los Orioles.
El Elias Sports Bureau nos dice que Estrada es el primer lanzador de Grandes Ligas en llevar un partido sin imparables hasta la octava entrada en aperturas consecutivas desde que Dave Stieb, el líder en victorias de los Azulejos, lo hiciera en 1988 - en ambas ocasiones con dos outs en la novena entrada y con el bateador en conteo de dos strikes.
La salida de Estrada fue el segundo partido donde más lejos se ha llevado un juego perfecto en las últimas dos temporadas, solo superado por las 8.2 entradas de Max Scherzer el pasado sábado.
Jugada cerrada - pero no controversial - acabó con la perfección
Aunque el intento de Estrada de conseguir el juego perfecto no terminó con una jugada controversial como el pelotazo a José Tábata de parte de Scherzer, no fue un hit claro que finalizó con el intento.
El batazo débil de Forsythe hacia la tercera base fue atrapado a mano limpia por Josh Donaldson, quien iba hacia al frente, y cuyo tiro a primera base llegó un poco tarde. La jugada fue revisada y se mantuvo la decisión original.
En su salida anterior, Estrada no permitió un hit hasta que el emergente Jimmy Paredes, abriendo la octava entrada, conectó sencillo. Estrada se llevó la victoria para los Azulejos 5-4.
Decepciones consecutivas para Stieb
Sin duda, Stieb puede relacionarse con lo que acaba de pasar Estrada.
El 24 de septiembre de 1988, Stieb perdió un partido sin hits cuando Julio Franco conectó un sencillo que cayó mal en el terreno.
En la siguiente salida de Stieb, el 30 de septiembre ante los Orioles, Jim Traber conectó un sencillo de bate roto con un elevado corto a los jardines para acabar el juego sin hits.
Ese fue el tercer partido de Stieb donde permitió un solo inatrapable en esa temporada, igualando la marca de la Liga Americana establecida por Addie Joss en 1907.
El miércoles, Estrada fue reemplazado por Roberto Osuna quien permitió el segundo imparable de los Rays, un doblete de Kevin Kiermaier, con el pizarrón 0-0 en la novena entrada.
Estrada no solo no pudo quedarse con el partido sin hits, sino que tampoco tuvo el consuelo de la victoria, aunque al final, los Azulejos vencieron 1-0 a los Rays en 12 entradas.