No hay más: es Marcelo Bielsa el personaje que le quita el sueño al futbol mexicano. A él lo están buscando para que se haga cargo de las selecciones nacionales. Alrededor de él, se quiere generar un nuevo plan de trabajo, un proyecto hasta el año 2022, pero el argentino tiene sus condiciones y exige sus garantías que siempre van más allá de lo económico. La ventaja aquí es que ambos se conocen: el futbol mexicano sabe lo que puede encontrar en Bielsa y Bielsa sabe lo que se encontrará en caso de aceptar la oferta.
LOS ANGELES, CA.- Para un futbol con síntomas constantes de una "locura" casi endémica , ningún remedio parece mejor que "un loco" sentado en la banca de su selección nacional.
Marcelo Bielsa es el nombre que le quita el sueño al futbol mexicano.
Lo están buscando, "por mar y por tierra", a través de promotores, de dirigentes, de ex futbolistas, entrenadores, tratando de encontrar el camino adecuado, con cuidado y delicadeza.
"Esta molesto porque piensa que durante el proceso que llevó a Hugo Sánchez a la selección mexicana (2006) su nombre fue utilizado simplemente para llenar un requisito", me dice una fuente muy cercana a la cúpula Del poder del futbol mexicano.
Pero la pregunta es: ¿Por qué el futbol de México parece convencido de que Marcelo Bielsa es la mejor decisión para tratar de reencaminar el proceso rumbo al Mundial del 2018?
Primero, me parece, por una cuestión formativa. Durante sus días en el Atlas, Bielsa dejó bien patentado su nombre y su reputación de un trabajador incansable en la cancha. El futbol mexicano quiere eso: un hombre que se meta, que profundice en ideas futbolísticas y que no se distraiga en otros temas. Segundo, creo, que se trata de un entrenador con experiencia y con resultados en otro nivel futbolístico, justo el nivel o el escalón al que hace mucho tiempo pretende llegar este futbol. Y tercero, la disciplina, la jerarquía y la "tolerancia cero" de Bielsa para trabajar y para exigirle resultados al futbolista. Todas estas virtudes lo convierten en el candidato ++si no perfecto++ en el más aproximado a una sensación idealista.
Bielsa es un "loco" que puede darle certeza y orden a las selecciones mexicanas, pero está claro que requerirá de muchas condiciones a su alrededor. En las negociaciones, que comenzaron hace ya algunas horas, se le ofrece un entorno favorable para su trabajo, sobre todo en el desarrollo de futbolistas jóvenes, que es finalmente una de las grandes virtudes del ex entrenador Argentina y de Chile. A Bielsa le gusta trabajar para el futuro y México necesita trabajo hacia el futuro, sin olvidar las necesidades de su presente inmediato: ganarle a Estados Unidos en octubre el choque de desempate para el boleto a la Copa Confederaciones y clasificarse al Mundial del 2018 en la zona de la Concacaf.
Marcelo Bielsa aglutina muchas ideas favorables sobre su trabajo, su liderazgo y lo que puede ofrecer hacia el futuro inmediato y lejano del futbol mexicano, pero él no aceptará, como no lo ha hecho con otras ofertas, si no existe la certeza y un plan de trabajo apropiado que le garantice que seguridad y estabilidad a su alrededor.
Hay una gran ventaja en la búsqueda de Bielsa. Y es que el futbol mexicano lo conoce, sabe donde están sus grandes virtudes, sus grandes defectos, sus fortalezas y debilidades, pero también Bielsa conoce bien las entrañas del futbol mexicano. Las conoció en sus días con el Atlas y las conoció mejor cuando tuvo oportunidad, con poco éxito, por cierto, de dirigir al América. Sabe cómo y a qué obedece el futbol mexicano. Sabe quien manda, quien decide y que es más importante siempre cuando se trata de la selección nacional.
Bielsa y el futbol mexicano: Uno y otro se conocen bien. Habrá que ver si terminan con un apretón de manos o un eterno hasta luego.
@Faitelson_ESPN