MÉXICO -- Después de 19 fechas (Alemania canceló su Gran Premio) la temporada 65 de la máxima categoría del automovilismo culminó en Abu Dabi con el triunfo de Nico Rosberg y el 12do 1-2 del equipo Mercedes en la temporada. Una marca histórica.
El piloto alemán tuvo un magnífico cierre de campaña pero queda la duda de si su compañero de equipo, Lewis Hamilton, quitó el pie del acelerador una vez sentenció el título a su favor en el GP de EE.UU. Lewis consiguió el tricampeonato y se une a un selecto club de históricos pilotos en el que figura su ídolo, Ayrton Senna.
Hamilton aprovechó el auto claramente superior que le proporcionó Mercedes, y carrera a carrera fue aniquilando a Rosberg. Si el año pasado el británico supo reponerse en la segunda mitad de la temporada y vencer al alemán, este año ya no le dio ninguna oportunidad. Ni siquiera los sábados de clasificación, un apartado en el cual Lewis quería mejorar. Y lo hizo.
Hamilton no tiene fisuras cuando el coche le responde. Sin duda es uno de los mejores en el negocio y un piloto de antología (junto con Vettel y Alonso). A diferencia de Nico, no cometió errores: cuando va puntero se siente cómodo y controla diferencias, distancias y tiempos al estilo Schumacher; cuando tiene que atacar y pasar, lo hace sin miramientos y como decía, mejoró su trabajo en los sábados. Pero no solo tiene las cualidades técnicas de un gran piloto. Lewis también venció a Nico en lo mental y quizá en este apartado, le puso una 'paliza'.
Queda en la anécdota aquel gesto de Hamilton cuando aventó a Nico la gorra de segundo lugar en Austin una vez conseguida la corona. Las actitudes de Lewis merecen examen aparte. Como piloto, excepcional, y sería bueno probar esta versión del inglés contra un Alonso o Vettel en condiciones de pelear.
Y si Hamilton tuvo un año "apasionante", como él lo describió, lo que hace Mercedes es digno de comparación con aquellas dinastías de McLaren o Ferrari.
'Las Flechas de Plata' no tuvieron rival bajo ninguna circunstancia o escenario: fuertes en lo lento, mixto o rápido; igual dominaban en Mónaco que en Monza y los circuitos de mediana velocidad o más mixtos fueron su ambiente natural. Tienen el mejor motor y aerodinámicamente quizá solo están por debajo de Red Bull. El W06 Hybrid se ajustó bien a toda la gama de Pirelli. Con la goma dura para la carrera eran tan rápidos como el resto con la goma blanda, una ventaja estratégica clave. Bajo calor, frío o agua, con altura o nivel del mar, fue un auto en verdad sólido que ya asusta para el año que viene y amenaza con extender su férrea dictadura.
A VETTEL LE VINO BIEN EL ROJO
Si Ferrari anda bien, a la F-1 le va bien. Es una máxima tácita en la categoría y aceptada por todo el Paddock. La marca del 'Cavallinon Rampante' mostró su músculo político al vetar una propuesta de la FIA para que un fabricante provea un motor 'barato alterno' para los equipos privados que quieran disponer del mismo. Maranello dijo no, y el asuntó se zanjó.
Afortunadamente para los 'Tifosis' alrededor del mundo, Sebastian Vettel y Kimi Raikkonen dispusieron de recursos suficientes para robar tres victorias y colarse a los Podios en la mayoría de las fechas (solo faltaron a cuatro citas).
Oportunamente Vettel llegó a Ferrari y se repuso de un mal 2014 disipando cualquier duda sobre su talento con esta campaña en la cual fue vencido por Hamilton (matemáticamente hablando) hasta la fecha 16 y prolongó la pelea por el subcampeonato (que bajo las actuales circunstancias no es despreciable) hasta la penúltima batalla. Además, se dio el lujo de celebrar tres triunfos. 'Seb' dominó a Kimi quien mejoró respecto al año pasado, pero de quien se espera más. Sobre todo, más consistencia.
La velocidad punta no es problema para Ferrari. La tienen. Mercedes los termina por batir en la velocidad en curva pero Raikkonen cruzó a 19 segundos de Rosberg (incluidos los perdidos en los pits por una llanta que no salía) en Abu Dabi. En Australia, donde 2015 inició, Vettel acabó a 34 segundos de la punta. Ferrari se acercó. Ya veremos qué pasa en Melbourne 2016...
'ANNUS MIRABILIS'
Que lejos en la memoria está aquel 2013, el 'Annus Horribilis' de Sergio Pérez en la F-1. Entonces, McLaren lo dejó para cifrar sus esperanzas en Kevin Magnussen (su joven promesa). 'Checo' llegó a Force India con ánimo de revancha y la ha conseguido.
El piloto tapatío está consolidado y lo que no lo mató, lo hizo más fuerte. Venció con claridad a Nico Hulkenberg, su compañero de equipo de quien se ha supuesto tiene 'pasta de campeón'. El ritmo de carrera, la gestión de los neumáticos, siguen siendo sus principales armas. Dio de nuevo el único Podio del equipo, (3ro en Rusia, con algo de suerte).
México volvió al calendario de la máxima categoría y organizó uno de los mejores eventos de la temporada. Pérez aprovechó la oportunidad para presentarse con el fan que no tenía tan en la mira a la F-1. No sé si 'Checo' Pérez tenga estatus de ídolo deportivo en México (como Javier Hernández). Pero sí sé que si no lo tiene, lo merece.
Este ha sido un breve repaso de lo sucedido en 2015 en la F-1. Aún quedan muchos temas en los cuales profundizar y otros de los cuales se esperan respuestas ¿Qué pasará con Renault y Red Bull? ¿Aston Martin y Force India se fusionarán? Y el reiterativo asunto en la máxima categoría, quizá históricamente me atrevería decir, ¿Cómo hacerla más pareja, sin perder en lo tecnológico? El embrollo existencial de la F-1.