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Ward-Kovalev 2, una revancha bajo un clima enrarecido

Andre Ward (31-0 con 15 KO) y Sergey Kovalev (30-1-1 con 26 KO) regresan a la acción este sábado en el Mandalay Bay de Las Vegas para protagonizar la revancha de la batalla que sostuvieron el 19 de noviembre pasado -- por los títulos semipesados OMB, AMB FIB -- y donde el estadounidense se llevó la victoria en las tres tarjetas, pero de manera controversial. La polémica fue tan profunda que esta batalla hereda todo ese clima enrarecido, algo que por igual afectará a los dos rivales, el réferi (Tony Weeks) y los tres jueces (Glenn Feldman, Dave Moretti y Steve Weisfeld). En lo previo, no hay duda de que esta pelea será muy diferente a la anterior.

OTRA DETERMINACION Y OTROS CUIDADOS

Es verdad que la segunda pelea entre Ward y Kovalev, tendrá mucho de lo mismo, pero no será lo mismo. Aceptemos que son dos púgiles sin la capacidad de mudar su ADN boxístico de una hora para la otra. Pero ello no impide los cambios Para esta revancha cambian las estrategias, cambia el uso de las herramientas de cada uno y en especial se altera la perspectiva. No alcanzará con sentirse ganador temprano (Kovalev) ni se podrá esperar esta vez la complicidad del réferi y los jueces a la hora de recurrir a cualquier recurso ilegal (Ward). Ambos rivales deberán - inevitablemente - basar todo su plan de pelea en superar los errores propios y ajenos de la batalla anterior.

Sergey Kovalev pondrá toda la carne en el asador temprano y necesariamente va a trabajar con mucha determinación toda la pelea sin perder el foco ni ceder demasiada iniciativa a su rival. En la pelea anterior consiguió mandarlo a la lona temprano y pudo repetirle la dosis. Le faltó consistencia y más confianza en su pegada. Ahora, el ruso ya sabe que el poder de sus golpes alcanzan para lastimar a Ward e inevitablemente deberá basar su plan de pelea bajo esa premisa: golpeo duro y muy temprano en la batalla.

A la insistencia con sus golpes de poder, Kovalev agregará esta vez la determinación para sostener el ritmo e incluso aumentarlo a medida que avance el combate. En la pelea anterior los jueces claramente favorecieron otorgándole a Ward asaltos que debieron ir para el ruso. Los jueces son otros, pero si la pelea se va a la distancia las consecuencias pueden ser similares. Por ello es una cuestión de sentido común para Kovalev cambiar el rollo de su película y no cometer las mismas equivocaciones. Mantener arriba su golpeo y cerrar cada asalto dominando el intercambio son factores necesarios para llevarse cada round.

Tampoco deberíamos ver una copia exacta del Andre Ward de la primera pelea. El también modificará planes y uso de sus herramientas. Ya conoce a su rival y ello le ahorrará ese espacio de tiempo que siempre dedica - al comienzo de sus batallas - a estudiar y adecuarse al estilo de cada oponente.

Pero no solo ese aspecto significa un cambio de una pelea a la otra, también habrá mudanza en el uso de sus herramientas y recursos. Ward suele recurrir muchas veces al amarre como un instrumento primordial en su estrategia ofensiva: entra en velocidad, golpea en secuencia y de inmediato amarra. Esta vez, ese recurso -- principal origen para la polémica de la pelea anterior -- no será bien visto y el réferi estará atento a castigarlo. Seguramente André Ward no lo utilizará tan a menudo por esa razón.

Tampoco deberíamos verlo entrando a golpear de manera frontal. Ya sintió la mano del ruso y sabe que puede lastimarlo de contragolpe. El Ward de la revancha mantendrá la velocidad, pero la utilizará para moverse lateralmente y sorprender con su golpeo desde los ángulos, algo que siempre complica a Kovalev. Asimismo lo veremos aumentar su volumen de golpeo, una forma de darle consistencia a los números, previendo que una vez más la pelea se decida en las tarjetas.

VELOCIDAD O GOLPES DE PODER DECIDEN LA VICTORIA

La estrategia basada en la velocidad que decida poner en práctica Ward o un plan de pelea donde la prioridad de Kovalev sea insistir con los golpes de poder, son las dos opciones para llevarse la victoria. Así será que veremos temprano a Sergey Kovalev trabajando desde la media distancia con la recta de izquierda y su derecha por afuera o confiando a Ward para que decida entrar a su territorio y responderle de contragolpe con golpes de poder a la barbilla. El objetivo será buscar el KO y bajo esa premisa girará todo su plan de batalla.

Ward se mostrará más activo que de costumbre. La velocidad de sus movimientos se mantendrá, pero utilizará más espacio del cuadrilátero para sus desplazamientos. Es difícil imaginarlo aceptando el intercambio, no podrá arriesgar una caída. El riesgo es que al contrario de la pelea anterior, una ida a la lona podría ser lapidaria ante la consideración de los jueces. Por ello Ward trabajará desde la distancia y cuando decida entrar a golpear y salir, buscará escabullirse rápidamente por laterales. Su plan basado en la velocidad apuntará a duplicar el golpeo de Kovalev y establecer esa premisa como primer argumento para que los jueces le otorguen una vez más la victoria en la pelea larga.

Ese aspecto, tal vez, sea el único que se mantenga inalterable en la lectura previa del combate. En la pelea larga es favorito Ward, mientras que para una decisión anticipada (KO) el gran favorito es Kovalev, excepto que el estadounidense vaya a la lona una o dos veces - algo muy probable - y ello le permita también asegurar la victoria al ruso por la vía de las tarjetas.

Seguramente veremos una pelea más atractiva y competitiva que la anterior. Mi presunción es que Sergey Kovalev ganará este combate por la vía rápida e incluso para una eventual definición en las tarjetas me afilio al mismo pronóstico, al amparo de la posibilidad cierta de que haya alguna caída de Ward y que esta vez los jueces a la hora de evaluar la actuación de uno y de otro, no cometerán los mismos errores de quienes juzgaron la batalla anterior.