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Pasión y color en Arizona para los playoffs de la NFL

Carlos Nava

GLENDALE, Arizona -- La fiesta grande de la NFL, la de postemporada, llegó al University of Phoenix Stadium. Sin importar el resultado final del partido, los aficionados de los Arizona Cardinals y los Green Bay Packers ya habían ganado desde horas antes de comenzar el partido de ronda divisional de la Conferencia Nacional.

Desde temprano por la mañana, la gente comenzó a merodear los estacionamientos del estadio en Glendale, Arizona; situado en el oeste del área conurbada de Phoenix, que se ha convertido en una de las capitales mundiales beisboleras de prácticas primaverales. Pero este sábado, quizá desde el lunes cuando el estadio recibió el juego de campeonato del futbol americano colegial, sólo se respiraba, soñaba, comía y sabía a NFL, a los Cardinals y a los Packers.

Las personas llegaron de cerca y de lejos. De diferentes puntos del estado de Arizona, de Wisconsin y de Green Bay. También del sur de la frontera con México, situado a menos de tres horas manejando del estadio.

“Venimos desde Hermosillo”, dijo Raúl Gómez, quien junto a varios amigos manejó desde su país sólo para asistir al partido. “Sonora es territorio de los Cardenales. Somos vecinos y ni modo de no apoyar....”. “Hoy ganamos”, anticipó. “Vamos a acabar con Aaron Rodgers y compañía...”.

El mariscal de campo de los Packers también trajo lo suyo. Cientos de aficionados de verde y amarillo, tal vez miles de “Cheese Heads” estaban también en la fiesta desde temprano. Rodgers es el heredero de las glorias de los más legendarios quarterbacks de Green Bay; de Bart Starr, de Brett Favre, y su presencia ni siquiera se compara con nadie más de su equipo.

“Aaron Rodgers nos hará campeones”, dijo Luis Suárez, un mexicano que viajó de Chihuahua para el juego.

“Muchos creen que este equipo ni siquiera puede competir. Veremos... Cuando tienes a Rodgers todo puede pasar. Él solo puede ganar”.

Entre Cardinals y Packers, algunos aficionados de los Cowboys estaban colados.

“La única manera en que los fans de Dallas llega a los playoffs es viniendo a ver a los demás”, bromeó Lucy Guerrero. “Hoy les damos chance porque van a apoyar a los Cardinals”.

La música de todos los estilos, desde rap, metal pesado hasta tambora, era el común denominador.

Los gorros con “Cabeza de Queso” contrastaban con los “Rayadores” de algunos personajes de Arizona. Igual sucedía con la bandera mexicana junto a la estadounidense en varias de las carpas del “tailgate”, que con los sombreros de charro junto a las cachuchas beisboleras o cascos de futbol americano.

La alegría líquida era evidente en buen parte de los presentes, de los que muchos ya se conformaban con llegar en estado decente a la hora de la patada de salida.