El mariscal de campo Derek Carr firmó un contrato millonario con los Oakland Raiders con un claro objetivo: ganar.
Carr está dispuesto a dejar de lado su brillo personal para conseguir victorias, incluso si eso significa no tener el balón en su poder.
"Mi objetivo N° 1 es asegurarme que le doy todo lo que tengo a esta organización", declaró Carr durante su conferencia de prensa con los Raiders tras firmar un acuerdo por cinco años y alrededor de 125 millones de dólares. "Así que no hay presión, nada de que 'Estaremos en la yarda 1 y no le daré el balón a Marshawn [Lynch], que lo lanzaré'. Nada de eso".
Carr hizo referencia a la última jugada del Super Bowl XIX en la que Russell Wilson lanzó un pase que fue interceptado por Malcolm Butler en lugar de darle el balón a Lynch en la yarda 1 para sellar la victoria de los New England Patriots sobre los Seattle Seahawks.
Para Carr el lucimiento personal está en segundo plano cuando se tratar de ganar partidos.
"No me importan las estadísticas, ese no es mi objetivo principal", sentenció Carr. "No me importa si lanzo 10 touchdowns el próximo año, si ganamos todos los partidos, eso es todo lo que me importa".
La temporada pasada, Carr tuvo marca 12-3 en los 15 partidos que jugó como titular antes de sufrir una fractura que puso fin prematuro a su temporada, asegurando un lugar en playoffs para los Raiders, que rompieron una sequía de 13 años sin postemporada.
En su carrera, Carr ha completado 1,055 pases para 11,194 yardas y 81 touchdowns con 31 intercepciones.