Si hay un equipo que, pese a las dificultades, sigue prolongando su hegemonía en el fútbol chileno es Colo Colo. Esta vez no pudo ser en el Campeonato Nacional, ya que el Huachipato de Gustavo Álvarez impidió que revalidara el título, amargando de paso a Cobresal en la última fecha del certamen, pero sí le alcanzó para levantar la Copa Chile 2023.
El 9 de abril arrancó el camino del Cacique a una nueva consagración. Debutó en los octavos de final de la Zona Centro Norte con el modesto Santiago City, de la Tercera División. Curiosamente, en ese partido de eliminación directa, fue visitante en el estadio Monumental y, con equipo alternativo, logró imponerse por 2-0, con anotaciones de Carlos Palacios y Marcos Bolados.
En la siguiente fase, disputada a principios de julio, el equipo de Gustavo Quinteros dio cuenta de Unión La Calera en un encuentro que también se disputó en el recinto de Pedreros y que terminó en goleada: 6-1, con hat-trick de Palacios, doblete de Jordhy Thompson y un tanto de Darío Lezcano, uno de los valores que arribó esta temporada a Macul y que vio muy poca acción.
Un mes después, los Albos enfrentaron a Palestino en semifinales y, pese a disputar el encuentro durante los 35 minutos con uno menos por expulsión de Jeyson Rojas, salieron airosos con anotación de Vicente Pizarro, para meterse en la definición de la fase zonal, donde se mediría con Universidad Católica.
En esta ronda, la Copa se definirían en partidos de ida y vuelta. En la primera final, que se jugó el 16 de agosto en Santa Laura, Colo Colo igualó sin goles con los Cruzados en un clásico para el olvido y, cuatro días más tarde, se quedaría con la revancha jugada en el Monumental, con solitario gol de Damián Pizarro.
Redención y fin de la era Quinteros
Instalados en las semifinales de la Fase Nacional, el rival sería el recién ascendido Cobreloa, rememorando una rivalidad histórica de nuestro fútbol. En el cruce de ida, disputado el 27 de septiembre en la cancha del Zorros del Desierto, el Cacique firmaría un vibrante 2-2 con aciertos de Palacios y Leonardo Gil, para luego ganar el duelo de vuelta en Pedrero con tanto de Maximiliano Falcón y sacar boletos a la final por un global de 3-2.
En la gran definición por el certamen, el cuadro de Quinteros se toparía con Magallanes, con el recuerdo vivo de principios de 2023 de la final perdida de la Supercopa de Chile. Sin embargo, ahora los Carabeleros llegaban al compromiso masticando la rabia del descenso, a sólo un año de su vuelta a Primera División.
El 13 de diciembre, en el Tierra de Campeones de Iquique, los Albos se reivindicarían de su irregular cometido en la temporada, dejando atrás no poder revalidar el título del Campeonato Nacional y otro año malo en torneos internacionales, alzando el segundo trofeo de nuestro balompié.
Colo Colo arrancaría perdiendo, con un penal de Joaquín Larrivey, pero revertiría el encuentro, encontrando el empate a través de Palacios, luego la ventaja con un remate de Erick Wiemberg que se desvió en Fernando Piñeiro y liquidaría el asunto con un golazo de Pizarro, para bajar su 14° estrella en el tradicional certamen.
Aquella victoria, con vuelta olímpica en el norte, sería además el último partido oficial de Gustavo Quinteros, luego de tres años y dos meses al mando de la cabina técnica del conjunto popular.
De esta manera, el elenco más ganador del fútbol chileno terminó con una sonrisa una compleja temporada 2023, sumando una nueva copa a su gran palmarés.