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En una noche accidentada, Argentinos lamentó el empate con Fluminense y definirá su suerte en Brasil

Argentinos Juniors y Fluminense igualaron en uno este martes por la ida de octavos de final de la CONMEBOL Libertadores, en un partido de alto vuelo que tuvo varios condimentos que terminaron perjudicando al "Bicho" de La Paternal.

El encuentro comenzó con los dirigidos por Gabriel Milito imponiendo condiciones, incomodando el Tricolor carioca. Y el gol llegó temprano, a los 14' de partido; un centro al área que cabeceó Ávalos para Javier Cabrera terminó con una devolución perfecta para que el delantero, con la pelota picando, la pusiera lejos del alcance de Fábio. Todo era alegría en La Paternal.

Al Flu le costó asimilar el golpe y acomodarse, pero lo logró. Y tuvo sus primeras aproximaciones.

Quien lo sostuvo, sin embargo, fue su arquero Fábio, tapándole un mano a mano muy claro a Ávalos a los 37' y un remate muy potente de Bíttolo sobre su palo derecho que lo exigió en el cierre de la primera mitad.

Y en el segundo tiempo las fichas jugaron para los brasileños, aunque en un comienzo parecía estar dado todo para Argentinos.

A los 58', un estremecedor planchazo de Marcelo sobre Luciano Sánchez terminó con roja y lágrimas de lamento para el brasileño y lesión y camilla para el futbolista argentino. Y ambos entrenadores debieron acomodar piezas; mientras Diniz sacó a Ganso y le dio minutos a Diogo Barbosa, Milito tuvo que darle ingreso a Pablo Minissale por el lesionado Sánchez, gastando un cambio que luego pagaría caro.

El Flu, sin embargo, no se achicó y comenzó a incomodar a Argentinos, hasta que el punto de inflexión llegaría a los 76', cuando un pase en profundidad para Diogo Barbosa obligó al arquero Martín Arias a salir a cortar, con falta, que el árbitro consideró para expulsión por último hombre.

Quien debió ocupar su lugar los últimos 20' fue el atacante Leonardo Heredia, porque Milito no tenía más cambios. Y pese a que tuvo la suerte de que no lo exigieran tanto, sufrió el empate de los brasileños, cuando un remate de volea desde lejos de Diogo Barbosa se le clavó en el ángulo. Pese a que voló como un arquero e incluso llegó a tocarla, el remate fue muy bien ejecutado y decretó el empate de los brasileños.

Argentinos se va con un sabor amargo por la mala fortuna que tuvo en el complemento, aunque con la tranquilidad de no haber perdido un partido que se le puso complicado sobre el final y la chance de viajar a Brasil a definir la serie.