<
>

Un delantero, el gran pendiente del Barcelona

Getty Images

BARCELONA -- El Barcelona comenzará este martes la pretemporada a las órdenes de Luis Enrique con la plantilla a medio hacer y varios asuntos, nombres, por resolver.

El entrenador asturiano, con más de media plantilla todavía de vacaciones, trabajará con algunos futbolistas con los que no cuenta, caso de Douglas o Adriano. Y confiando en que la labor del secretario técnico, Robert Fernández, cumpla con lo esperado: el fichaje de un delantero.

No es fácil, como podría parecer a simple vista, el fichaje de un jugador específico para reforzar el ataque azulgrana. Vietto se mantiene en el escenario del que Gameiro se va borrando y al que no acuden Gabriel Jesús y otros potenciales futbolistas por una razón simple: no es cómodo vivir a la sombra de la MSN.

La pasada temporada Messi, que se perdió por lesión cerca de dos meses de la temporada, totalizó 76 por ciento de los minutos posibles; Neymar rozó 80 por ciento y Suárez alcanzó 85. Munir, el más utilizado y que disfrutó de sus momentos de gracia durante la recuperación de Leo, se quedó en 29 por ciento. Y se sabe, a ciencia cierta, que con los tres cracks en condiciones ese porcentaje de tiempo amenaza con descender aún más.

DESCONFIANZA
El Barça tiene dinero para fichar pero no encuentra a quien. Por difícil que parezca de entender y aunque el secretario técnico lo explicó de manera gráfica. "Hay futbolistas que no aceptan venir porque su rol en el Barcelona cambiaría muchísimo; son muy buenos en sus equipos, pero su situación aquí sería distinta", resumió Robert.

Es el caso, se especula, de Gabriel Jesús. El joven delantero se ha catapultado como el último diamante en bruto del futbol brasileño y a sus 19 años se le adivina un futuro esplendoroso. Y a su alrededor, personas de su confianza le han avisado de lo que le esperaría en el Camp Nou.

Ocurre algo parecido con Gameiro, pretendido también por el Atlético de Madrid. El delantero francés abandonó en 2013 el PSG rumbo a Sevilla cansado de ser una simple comparsa a la sombra de Ibrahimovic y Lavezzi. Jugó 32 partidos durante la temporada... Pero solo fue titular en nueve y apenas completó tres de ellos.

De hecho, es una de las razones, sino la principal, por la que Pedro dejó el Camp Nou en el verano de 2015. En cuanto se acabó la sanción de Luis Suárez, en octubre de 2014, su presencia en el once de Luis Enrique cayó en barrena y aunque acabó jugando 51 partidos, se quedó en 40 por ciento de los minutos.

"Munir ha aprendido a esperar su oportunidad. También porque es de la casa y tiene la confianza de los técnicos", se traslada desde el club. Pero se sabe que la situación del joven canterano, sobrepresionado cuando debe ocupar la plaza de alguno de los cracks, es muy difícil de aceptar por alguien externo al Barcelona.

La secretaría técnica ha peinado el mercado a conciencia y ha estudiado no pocos nombres, por inesperados que puedan parecer, confiando en que encajasen en lo que espera Luis Enrique. Y no encuentra solución.

También porque debe tenerse en cuenta que el club, dispuesto a pagar su fichaje, no contempla ofrecer un salario de desorbitado a ese futbolista que venga. Si Umtiti llega a luchar por un puesto en la zaga, Digne para ponerle las cosas difíciles a Jordi Alba y Denis Suárez a reforzar la competencia en la zona media, en la delantera está cantada la suplencia de quien llegue.