El entrenador de la Selección Argentina Lionel Scaloni, recibió este martes la insignia de oro y brillantes del Deportivo de La Coruña, club en el que jugó entre los años 1997 y 2006, de manos de su nuevo presidente, Álvaro García Diéguez.
En el descanso del partido entre el Dépor y el Atlético Arteixo del Memorial Arsenio Iglesias, el exfutbolista y actual DT de los campeones del mundo saltó al césped acompañado de sus dos hijos.
El Riazor se puso en pie y empezó a corear su nombre, mientras en las pantallas se pasaban imágenes de su etapa como jugador del Dépor y una foto suya posando con la Copa del Mundo que conquistó como técnico de la albiceleste en Qatar 2022.
Scaloni, jugador de la historia que más partidos disputó en la UEFA Champions League con el Deportivo, no pudo contener las lágrimas. Se llevó la mano al escudo varias veces y, junto a sus hijos, se acercó al fondo donde están situados los Riazor Blues, que no dejaron de arengarlo.
El DT se paseó por el césped para saludar a los más de 6.000 hinchas que se acercaron al estadio para brindarle un homenaje que tendrá continuidad esta noche con la lectura del pregón de las fiestas de María Pita.
Antes, aún en el césped del estadio, representantes de la federación de peñas le entregaron una réplica de la Torre de Hércules.
En el aire había una pregunta: si le gustaría volver al Deportivo como entrenador. "Un lugar que te ha dado tanto, en algún momento habría que volver. El tema es encontrar el momento para que se pueda", confesó.
Un recuerdo que llevó a Scaloni a echar la vista atrás, a aquel 1997 en el que le llegó la “oportunidad de jugar” en el Deportivo, lo que fue “la mejor elección” de su vida, “sin duda”.
La despedida no podía ser de otra forma que con el cántico de ‘Cómo me voy a olvidar que el Deportivo ganó la Liga’, y el argentino demostró que todavía se la sabe bien.