MELBOURNE -- Petra Kvitova estuvo apenas una hora en cancha en su debut en Australia, y se instaló en segunda ronda con un concluyente 6-1 y 6-4 sobre la holandesa Richel Hogenkamp (138ª). Pero al margen de la superioridad en el juego, el trámite para la checa resultó un severo desafío mental. "No fue fácil manejarlo, estuve muy nerviosa", explicó la campeona de Wimbledon.
¿Por qué tanta cautela previa? Por un mal recuerdo que se mantuvo presente estos 12 meses: la derrota en la primera ronda de 2014, ante la tailandesa Luksika Kumkhum, por entonces N°88 del mundo. Fue la peor derrota de Kvitova en un Grand Slam desde 2011. Y dejó su marca...
"Lo tuve en la cabeza todo el día, y durante el partido me sentí muy tensa. Por momentos se me endurecían las piernas y no me podía mover. Pero me alivia haberlo sacado adelante. Ojalá ahora pueda empezar a dejar todo aquello atrás", amplió la checa.
Para colmo, las primeras jornadas de 2015 también vieron irse en el debut a varias Top 20, incluidas Ana Ivanovic y Angelique Kerber en el primer día de acción: "Obviamente eso también jugó su parte. Yo sé lo que están sintiendo hoy esas chicas y no es nada sencillo de superar. Pero así es el deporte".
En su cuenta de Twitter, resumió las sensaciones: "Hola segunda ronda, lindo verte de nuevo".
Ahora buscará romper otra marca adversa: escalar a segunda semana de un Grand Slam que no sea Wimbledon por primera vez desde el US Open 2012.