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Luis Enrique quiere retener a Alves

Getty Images

BARCELONA -- "Es un jugador único, pero esa es una decisión que debe tomar el club". Franco en su respuesta, Luis Enrique no escurrió el bulto cuando se le preguntó por su opinión acerca de la continuidad o no de Dani Alves en el Barça. Un caso que sigue en el primer plano, en el que la directiva se mantiene silenciosa y que a cada día que pasa se complica un poco más.

El entrenador hizo bueno el dicho de 'por sus hechos les conoceréis' y dio a entender que para él no hay ninguna duda acerca de la conveniencia de acordar una renovación para el brasileño. "A través de mis decisiones a la hora de hacer las alineaciones se puede ver la confianza que tengo en él", convino el asturiano, trasladando de esta manera toda la responsabilidad a la directiva.

Alves, sin embargo, se sabe señalado desde los despachos y no acaba de comprender las razones. "No sé cuánto durará mi relación con este club, pero, mientras forme parte de él, los míos estarán muy orgullosos de mi dedicación y de mi entrega", proclamó el brasileño a través de las redes sociales el miércoles, advirtiendo que nadie "podrá ensuciar mi nombre". Toda una declaración de intenciones, un aviso de lo que siente a su alrededor, por mucho que en el vestuario se mantiene una fe ciega en él.

"No es hora de hablar de ello" suele cortar Bartomeu, quien a la vez que insta a la comisión deportiva a trabajar en el futuro de la plantilla, cambia de discurso al referirse a un jugador que acaba contrato, justo cuando renueva a otro, Busquets, con años por delante todavía. "Tenemos propuestas" repite Dinorah Santana, la representante de Alves, dando cuenta de que es el Barcelona el único que tiene respuestas al futuro de Dani en el club, por cuanto mantiene a la espera cualquier decisión.

Luis Enrique es el único que de momento ha hablado claro al respecto. El entrenador tiene aparcados tanto a Montoya como a Douglas y confía de forma evidente en Dani Alves, su lateral derecho sin discusión. Si fuera por el asturiano, la continuidad del brasileño no estaría en cuestión. Y si lo está, quizá habría que preguntarse hasta qué punto tiene capacidad de decisión el técnico en el club. Si es que la tiene.