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70 mil aficionados acuden a Zócalo y podrían vivir otra experiencia de F1

MÉXICO -- Las nubes cubrieron el cielo de la Ciudad de México el día que la capital recibió el F1 Showrun organizado por Red Bull. Aunque se temía que lloviera, el clima fue cómplice para que el evento fuera más cómodo para los 70 mil aficionados que estuvieron en el primer cuadro de la capital.

“Pues mientras no llueva”… dice Teresa Estrada, madre de dos niños y una pequeña bebé “que no vino, porque está muy chica”.

“Uno viene sobre todo por los niños”, agrega Teresa, quien junto a su esposo y sus hijos de 7 y 9 años hizo fila para poder ver al equipo que suma cuatro campeonatos en el Gran Circo, aunque reconoció: “Yo no sé nada de coches, pero mi esposo e hijos quisieron venir”.

“No pudimos comprar boletos para el Gran Premio se acabaron en chin…”. Comentó Julio Cortés, aficionado que estuvo en el evento en donde rodó el RB7.

“Pero ahora es cuando para estar cerca de los F1 y poder escucharlos”, espera Julio de 23 años, quien llegó desde las 7:00 de la mañana al sitio junto a sus dos primos.

Los protagonistas fueron el australiano Daniel Ricciardo, piloto titular del equipo austriaco y el español Carlos Sainz Junior, de Toro Rosso, escuadra “B” de la organización. Ambos salieron alrededor de dos horas después de hablar con los aficionados.

El evento abrió a las 10:55 am y cerró 12:25 pm. Los dos RB 07, auto campeón de la temporada 2011, hicieron cuatro ‘hits’ alrededor de la Plaza de la Constitución y por la Avenida 20 de noviembre. El cuarto fue de lejos el mejor, pues Tavo Vildósola retó con su Throphy Truck a los dos bólidos.

Tanto Daniel como Carlos aceptaron el reto y junto a Tavo prendieron el ambiente. El clima fue inmejorable, pues se apreció el monstruoso y grave motor de la camioneta, junto con el penetrante y agudo de los F1.

“Es probable que en agosto –a principios de mes- la Ciudad de México reciba otro evento parecido para todos los aficionados que visten de rojo les tenemos una sorpresita”, adelantó Rodrigo Sánchez, subdirector de mercadotecnia del GP de México.

Sobre el evento Daniel comentó: “Lo que más extrañan los fanáticos de la F1 es el ruido de los motores, pero hoy escucharán cómo era antes en el Zócalo”.