BUENOS AIRES -- El receso del fin de semana por las Elecciones nacionales fue un corte necesario para muchos equipos. Una especie de “barajar y dar de nuevo” pensando en la recta final del campeonato.
Boca y San Lorenzo son líderes; el River multicampeón de Gallardo, dulce tras ganar la Libertadores y la Suruga Bank, puede quedar también como puntero si se impone en el partido pendiente ante Defensa y Justicia.
Los tres son grandes candidatos a conquistar el certamen y en las 11 fechas que faltan jugarán una especie de “mini torneo” para definir el título del torneo de Primera División.
Boca tiene el fixture más complicado. Los Xeneizes deberán enfrentar a Gimnasia de La Plata, de muy buen campeonato, como visitantes (fecha 22), y enseguida se vendrán de manera consecutiva San Lorenzo (local, fecha 23) y River Plate (en el Monumental, fecha 24).
Una seguidilla de partidos que seguramente puede definir el futuro del equipo en el campeonato (y seguramente de su DT). Boca necesita ganar un campeonato luego de tres años de frustraciones y más ahora, que River, el rival de toda la vida, llega dulce en el ámbito internacional.
Luego de esta dura serie de tres partidos, quedarán varios choques complicados: Racing (fecha 28) y Rosario Central, de visitante, una de las revelaciones, en el cierre del torneo. En el medio, jugará de local con Tigre, dirigido por Gustavo Alfaro, siempre un rival “molesto”.
San Lorenzo, por su parte, también la tiene difícil. Además de visitar a Boca en la fecha 23, jugará el clásico contra Huracán en la jornada siguiente, que pese a que pelea el descenso vivirá este duelo como una final; luego recibirá al campeón vigente, Racing, en el clásico, visitará al duro Tigre de Alfaro y será local ante el Rosario Central del Chacho Coudet.
A diferencia de Boca, el tramo final del torneo parece ser más relajado, con rivales que en principio se presentan accesibles, como Olimpo, Temperley y Rafaela.
River tiene el fixture más accesible en la previa: primero se vendrán San Martín, Estudiantes, Huracán y Chicago, todos antes del superclásico contra Boca.
Recién en la fecha 27 se presenta otro rival de riesgo: Independiente, en Avellaneda. Las últimas fechas, en tanto, no serán ante rivales directos: Aldosivi, Vélez y Newell’s.
En el caso de los Millonarios, que llegan en un gran momento por las conquistas internacionales, la incógnita pasa por saber si podrán mantener el nivel que vienen mostrando en los últimos tiempos.
Y si la mentalidad ganadora que le impuso el Muñeco al equipo no sufre ahora una cierta relajación, lógica cuando los logros ya quedaron atrás y hay que renovar la motivación.
Por supuesto, todos los partidos deben jugarse y muchas veces los adversarios más débiles son los que terminan dando sorpresas y arruinando campeonatos. Habrá que esperar, entonces, para ver cómo se define este torneo de 30 equipos.