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Llegan con lo justo

BUENOS AIRES -- Se acerca el final del campeonato y los equipos empiezan a sentir el desgaste. Boca y San Lorenzo, los máximos candidatos al título, no son una excepción.

La fecha pasada dejó en claro que de acá al final del torneo habrá que extremar los recaudos: una amarilla o una expulsión pueden terminar condicionando todavía más a dos planteles que llegan a la recta final, desde lo físico, con lo justo y necesario.

Está claro que Boca, en ese sentido, cuenta con ventaja: tiene un plantel más largo que el de San Lorenzo. Sin embargo, Rodolfo Arruabarrena sufrirá de cara al partido contra Argentinos más bajas que su rival directo por el título.

Repasemos: frente a River, el DT xeneize sufrió la lesión de Fernando Gago en el tendón de Aquiles (tiene al menos para seis meses de recuperación), más las amarillas a Cristian Erbes y Marcelo Melli (sumaron cinco y deberán estar una fecha sin jugar). Unos días antes del superclásico, el técnico se había quedado sin Pablo Pérez, pieza clave en el mediocampo, desgarrado.

Así, en relación al 11 inicial ante los Millonarios, el Vasco deberá cambiar casi todo el mediocampo. No es un dato menor, pero lo cierto es que Boca se puede dar algunos “lujos” que no todos los clubes tienen: por caso, el uruguayo Nicolás Lodeiro, figura ante los Millonarios, saltará a la cancha como titular.

También estará el pibe Adrián Cubas, una de las grandes promesas surgidas de las Inferiores del club; otro que promete, Bentancur, podría seguir en el equipo titular, pero también aparecen los nombres de Fuenzalida por derecha y de Colazo por izquierda.

Hasta acá, nada para preocuparse, siempre y cuando Tevez, el as de espadas, que viene con molestias y entrenando diferenciado, no pida descanso. Por ahora el Apache quiere jugar: sabe lo que representa.

San Lorenzo también deberá apelar al recambio en forma obligada, en este caso por las expulsiones de Matías Caruso y Julio Buffarini ante Huracán. Son dos de los pilares de la defensa menos vencida del torneo, y en su lugar ingresarían Mauro Cetto y Gonzalo Prósperi o Matías Catalán (para cubrir el lateral derecho).

Además, Mario Yepes, Sebastián Blanco y Héctor Villalba arrastran molestias musculares y están en duda. “Llegamos a la recta final con la reserva”, declaró Bauza, en referencia a las bajas.

El DT, muy cuestionado por los planteos, tiene razón en un punto: las ausencias de Romagnoli y Barrientos no ayudan a que el Ciclón encuentre el juego que le hace falta y que se le exige al entrenador.

El Pipi Romagnoli se recupera de una lesión en la rodilla y no podrá jugar hasta el final del torneo, mientras que el Pitu sufrió un esguince en los ligamentos y tiene al menos para una semana más de recuperación.

En este caso, Bauza no cuenta con jugadores de selección, como Lodeiro o Fuenzalida en Boca, para que ocupen los puestos vacantes. Y el rendimiento del equipo en las últimas fechas sufrió una merma importante en lo futbolístico. ¿Le alcanzará la nafta que tiene en el tanque?

Boca tiene más en cuanto a los nombres, pero eso no siempre es garantía de un buen funcionamiento y mucho menos de resultados.