BRASILIA (Enviado especial) -- "Entrá y cambiá el partido". Esta es una idea trillada en el fútbol. Cuando las cosas no van bien, se piensa en que los jugadores del banco de suplentes serán los salvadores. A veces sucede y otras veces no. En el segundo partido de la Selección Colombia en la Copa del Mundo esto funcionó a la perfección. Juan Fernando Quintero entró en la segunda etapa y fue clave en la segunda victoria del equipo en Brasil.
Este triunfo sobre Costa de Marfil no es uno más para el fútbol cafetero. Es la confirmación del renacimiento, de que otra vez están en la elite, entre los mejores. Además, quedó en la historia porque, por primera vez, Colombia gana dos partidos en un mismo Mundial y por segunda se clasificó a los octavos de final. Así de importante fue la victoria y el gol de Quintero.
La Selección jugaba bien pero le faltaba algo para inquietar más a su rival. James Rodríguez chocaba demasiado y estaba muy sólo y Teófilo Gutiérrez debía retroceder demasiado. Además, Víctor Ibarbo estaba más pendiente de Aurier que de atacar y Juan Guillermo Cuadrado brillaba como de costumbre pero tenía pocos socios. Entonces, José Pekerman decidió incluir al joven mediocampista paisa y todo cambió.
Juan Fernando ingresó en reemplazo de Ibarbo para que James pasara a jugar un poco más adelantado y por una de las bandas. Se paró como enganche y esa responsabilidad no le pesó para nada. Condujo al equipo con serenidad y jerarquía y su figura hizo crecer la del número Diez. Además, marcó su primer gol mundialista y pidió pista para ser titular en el futuro. Todo eso hizo Quintero en sólo 37 minutos.
ESPNFC.com sigue acompañando a la Selección Colombia en Brasil y, tras la gran victoria, charló mano a mano con el protagonista del día en el estadio Nacional de Brasilia.
--¿Qué significa para vos este gol?
--Son sensaciones muy bonitas, estoy muy contento más por lo que representa el 2-0 en un partido como éste. Uno siempre se imagina hacer un gol en un Mundial, hacer las cosas bien. Además, personalmente me siento muy orgulloso de mis compañeros.
--¿Qué te dijo el Profesor cuando te puso?
--Me dijo que maneje la pelota, que aproveche los espacios del rival y que intentara dejar mano a mano a los delanteros.
Entonces traté de hacer eso y por suerte me quedó la oportunidad de gol y pude marcar.
--¿Qué gana la Selección con James y vos al mismo tiempo?
--Creo que gana mucho. Somos dos jugadores con similares características, pero sabemos que James es un jugador que puede jugar por el costado o en el medio y en mi caso yo soy más central. Creo que ganamos en el toque, en el manejo de pelota, la sorpresa, el balón largo, el balón corto. Igual, Colombia tiene grandes jugadores, no sólo nosotros podemos hacer eso. La velocidad y el manejo son dos de las características del equipo.
--¿Cómo evaluás este partido?
--Fue un partido muy cerrado, muy difícil, donde Costa de Marfil no daba espacios. Pudimos aprovechar dos jugadas de contragolpe donde casi se nos mete una y la otra también pudo haber sido gol. Pero Colombia hizo las cosas bien, sacó personalidad y casta.
--¿Cómo se sintieron en Brasilia?
--Muy bien, nos sentimos como en casa. Eso emocionalmente te ayuda y los hinchas nos dan mucha de la fuerza que necesitamos.
--¿Cómo imaginás el futuro?
--Sólo pensamos en Japón. Tenemos un partido muy importante y tenemos que pensar en recuperarnos bien y esperar que el profesor analice para estar a la altura del siguiente juego.
--¿Qué es lo mejor de este equipo?
--Creo que es la unión, saber que todos representamos a nuestro país, que sufrimos y que podemos hacer las cosas bien en el campo. Sabemos que tenemos un gran equipo y conocemos lo que cada uno puede aportar.