LA ROMANA -- ¿Quién sería su segunda base a la hora de formar un equipo de Grandes Ligas: Dan Uggla, Chase Utley, Plácido Polanco, Dustin Pedroia o Robinson Canó?
En lo que usted prepara su respuesta, quizás se tome algunas horas o días, el antiguo astro de esta posición, el boricua Roberto Alomar ni titubeó al elegir de inmediato al dominicano Robinson Canó a quien definió como el más excelso jugador del momento en la segunda almohadilla.
"No tengo dudas algunas, el mejor de esta posición en la actualidad es Robinson Canó, y me inquieta que lo diga en su país, pero por suerte ya lo he comentado. Ahora mismo es el mejor, yo no sé quien vendrá mañana, pero el mejor de ahora es Canó a pesar de que los otros son muy buenos también", dijo Alomar durante una ceremonia efectuada en el prestigioso anfiteatro de Altos de Chavón, ubicado en la ciudad de La Romana, a 110 kilómetros al Este de Santo Domingo, capital dominicana.
"Mira, todos son muy buenos, yo no puedo quitarle mérito a ninguno, son estrellas, pero para mí Canó tiene todas las herramientas para ser el mejor segunda base de esta era", comparó Alomar.
Acompañado por su esposa Maripily y su hijo, Alomar arribó a tierra dominicana dos horas antes de ser exaltado al Pabellón de la Fama del Béisbol Latinoamericano de recién creación, en el cual fueron instalados una serie de luminarias del béisbol regional.
"Creo que es un lugar que nos merecemos, muchos que no tienen los méritos suficiente para llegar al Salón de la Fama, el grande, pues tienen una gran recompensa con esta creación", argumentó.
Sin embargo, el ex astro puertorriqueño refirió que no es su caso particular, ya que espera entrar a Cooperstown en la próxima elección luego de quedar "a un paso de la puerta" en la última votación.
Considerado como el mejor segunda base de su generación y con 12 selecciones al Juego de Estrellas, fue el tercero en la votación con 397.
Esta cantidad lo convirtió en el jugador con el total de votos más alto para un candidato en su primer año sin ser elegido.
"Claro, claro, fue algo frustrante para mí y para mi familia que me acompañaba como estamos aquí ahora, esperamos otra historia en la próxima votación porque nos quedamos parado en la puerta del gran salón, pero no pudimos pasar", dijo Alomar a ESPNdeportes.com.
Puerto Rico ha visto a dos de sus grandes glorias entrar al Salón de la Fama, Roberto Clemente y Orlando Cepeda.
Con 10 guantes de oro y 4 bates de plata en su carrera de 17 años con San Diego, Toronto, Cleveland, Baltimore, Tampa Bay y otros conjuntos de las Grandes Ligas, Alomar espera con humildad su inmortalidad, también avalada con un promedio de .300 y 210 cuadrangulares y 472 bases robadas.
"Robertico", de 43 años, no completó el 75 por ciento requerido, sólo recibió un 73.7 por ciento, producto de 397 votos, y por el momento no podrá unirse a sus compatriotas Clemente y Orlando Cepeda en la casa de los inmortales.
"Voy a estar ahí pronto para alegría de mi gente boricua y para toda Latinoamérica y así celebraremos todos juntos, ya eso viene por ahí".
"Mis números están ahí, yo estuve en doce Juegos de Estrellas, entonces no fui tan mal jugador", bromea Alomar mientras juega con su hijo. "Lo que duele es quedarse fuera por 8 votos, pero sé que alguna vez entraré para siempre".