BUENOS AIRES -- Francia, el ultimo campeón del Seis Naciones, ya pisó fuerte en el suelo argentino. Luego de la victoria frente al segundo equipo nacional por 37-14, los galos se preparan para su compromiso frente a Los Pumas, del próximo sábado en Vélez.
Y Clement Poitrenaud tiene una cuota pendiente. Sabe lo que es ganar títulos a lo largo de su carrera y sobre todo en este 2010. El fullback ganó con Francia el 6N y hace poco consiguió la Copa Europea de clubes con el Toulouse. Sin embargo le reconoció a Scrum.com que le queda en el tintero. "Le gané varias veces a los All Blacks, pero nunca a la Argentina", contó.
- ¿La derrota frente a los Springboks los exige a conseguir un triunfo?
- No nos obliga a ganarles. Pero la realidad es que marca que debemos hacer un mejor partido que contra Sudáfrica. No podemos permitirnos tener el bajo nivel de juego que demostramos. Estoy seguro de que va ver una reacción en el equipo francés.
- ¿Cómo se preparan para enfrentar a Los Pumas?
- Este partido lo tomo de manera muy peculiar. Nunca le pude ganar a Los Pumas. Le gane varias veces a Nueva Zelanda pero nunca al equipo argentino. Si podemos ganarle, va ser un alegría en lo grupal y en lo individual.
- ¿De qué jugador deben tener precauciones?
- Que no esté Juan Martín Hernández, de algún modo, es un alivio. El es uno de los mejores jugadores del equipo. Igualmente, mi compañero Patricio Albacete es un jugador positivo y capaz de llevar a los quince hacia adelante. El es el líder de los forwards.
- Acá en la previa de un partido entre Argentina y Francia no hay ocasión en la que no se recuerde al Mundial 2007, ¿para ustedes también o es un tema del pasado?
- Nosotros estamos muy concentrados y tenemos puesta la cabeza en el próximo encuentro. Ha sido muy duro caer en el Mundial organizado por nosotros y perder el tercer puesto en manos de ellos. Pasó mucho tiempo y los equipos son totalmente distintos. No es una revancha porque ésta es otra historia.
- ¿Hablaste con Albacete en la previa?
- Sí, hablé con él hace unos días. Le comenté que a pesar de ser compañeros en el Toulouse, el sábado dejamos de ser amigos. Por lo menos durante los ochenta minutos que dura el partido.