BUENOS AIRES -- La 117° edición del Abierto Argentino de Palermo tuvo su merecida presentación. Calor, color, celebridades, adrenalina y polo, mucho polo, fueron parte obligada de un repertorio que sentó las bases de una nueva temporada del máximo nivel internacional de este deporte.
La Dolfina, defensor de una corona ganada espectacularmente en 2009, resultó ser quién diera el paso inicial en un torneo al que llegan fanáticos del polo de todo el mundo. Junto al actual monarca, el joven Sao José resultó ser más que un digno contrincante para la cita inaugural.
Amparado en sus 30 goles de handicap y un orgullo imperecedero, el conjunto de Pablo y Nicolás Pieres fue toda una revelación en la primera fecha del Abierto. Al margen del resultado final, que favoreció ampliamente al conjunto de Adolfo Cambiaso (18-12), supo tener momentos en los que sorprendió con su estrategia ofensiva y una actitud desenfadada.
Así fue como se puso, en un principio, arriba en el marcador y consiguió preocupar al multicampeón de Palermo. La sorpresa duró bastante más de lo que muchos se imaginaban en las calurosas tribunas de la cancha 2. Recién en el 6° chukker se vio un sustancial cambio en las riendas del partido.
Fue en aquel segmento en el que la Dolfina consiguió establecer diferencias (empataban 8-8) y sacar una luz de ventaja sobre un sorpresivo rival. Mucho tuvo que ver el desempeño del más grande del polo mundial. Adolfito no había aparecido en toda su expresión hasta allí.
Tal vez por el calor, tal vez por circunstancias del juego o por cuestiones imposibles de dilucidar su estrella no se había mostrado en todo su esplendor. Sin embargo, cuando el cotejo entró en su etapa final surgió como el guía que necesitaba su equipo. Es válido acotar que Bartolomé Castagnola también resultó una pieza clave para este triunfo. Pero, el toque Cambiaso, el que todos esperan cuando se acercan a ver un partido de polo, fue el que le dio otro cariz al entretenido encuentro.
El campeón, entonces, tras un comienzo dubitativo, encontró el camino correcto para desplegar su esquema y plasmar en la cancha toda su expresión. Y completó una jornada de estreno con destellos del polo que lo llevó a la máxima consagración hace sólo una temporada.
Los equipos
La Dolfina Peugeot: Adolfo Cambiaso (h) 10 (14 goles, cinco de penal y uno de córner), Lucas Monteverde (h) 10 (1), David Stirling (h) 9 y Bartolomé Castagnola 10 (3) (Recibió una tarjeta amarilla en el octavo chukker). Total: 39.
Sao José Audi: Pablo Pieres 7, Nicolás Pieres 7 (2), Rodrigo Ribeiro de Andrade 8 (2) y Jaime García Huidobro 8 (8, siete de penal). Total: 30
Progresión de los puntos La Dolfina Peugeot: 1-3, 4-4, 6-5, 7-7, 8-8, 13-9, 17-11 y 18-12.
Jueces: Matías Baibiene y Martín Goti.
Árbitro: Julio Bensadón.