DACA -- El capitán del seleccionado argentino, Lionel Messi, advirtió que hubo "patadas de mala leche" por parte de los futbolistas de Nigeria en el amistoso disputado este martes en el estadio Bangabandhu de Daca, capital de Bangladesh.
El astro de Barcelona de España reconoció que el juego "por momentos se hizo muy fuerte", aunque lo consideró "cosas del fútbol" y rescató que "todos (los jugadores) salieron bien" al cabo del partido con el seleccionado africano.
Messi se marchó de la cancha con un corte en el labio inferior producto de un duro cruce del defensor Chibuzor Okonkwo en el primer tiempo.
Subrayó que Argentina "sigue creciendo" en el inicio de la era de Alejandro Sabella y lo valoró ante la inminencia de las Eliminatorias Sudamericanas para Brasil 2014.
"Siempre es positivo ganar, se trabaja con mayor tranquilidad, especialmente después de todo lo que venimos pasando, las derrotas, los fracasos... Es muy bueno empezar así pero queda mucho camino", explicó en diálogo con los medios argentinos en Daca.
El rosarino, de 24 años, opinó que Argentina "ganó bien" con un funcionamiento caracterizado por "la tenencia de la pelota" y la intención de "crear situaciones".
"Como en el primer partido, pese a que la cancha no era buena hacía calor, la selección dejó una buena imagen y se ganó, que es lo importante", dijo.
Finalmente, relativizó la continuidad de su racha sin goles y se consoló con que "por lo menos terminó en gol de (Angel) Di María" la gran jugada personal que derivó en el segundo gol del equipo.
En el arranque de la gestión de Sabella, el seleccionado nacional ganó sus dos partidos: 1-0 a Venezuela en Calcuta, India, y 3-1 a Nigeria en Daca, Bangladesh.