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Y menos mal que le tiene respeto...

BUENOS AIRES (AP) -- Diego Maradona no pudo ocultar su fanatismo por Boca Juniors al asegurar el martes que River Plate, reciente ganador del título Clausura del fútbol argentino, es "un campeón de cabotaje" a diferencia del conjunto "xeneize", que llegó a la final de la Copa Libertadores.

"Boca demostró que se puede jugar la vida tranquilamente en la historia. River demostró que es un excelente campeón de cabotaje (de trascendencia local) porque cuando fue a
Colombia no puso lo que pone Boca", dijo Maradona a una radio local.

El ex capitán del seleccionado argentino, confeso simpatizante de Boca, se refirió así a la eliminación de River como visitante ante el América de Cali por los cuartos de final del torneo continental. En las semifinales, fue Boca el que dejó en el camino al conjunto colombiano.

"No quiero desmerecer el logro de River pero digo que cuando salió afuera no puso. Nosotros la presión la tememos, pero Boca jugó con presión toda la vida", agregó Maradona, quien vistió la camiseta "xeneize" en 1981.

Tras su consagración el domingo como campeón del torneo Clausura, River ratificó su dominio en el fútbol local con 31 títulos, doce más que el eterno archirrival.

En la misma semana Boca, en cambio, podría revalidar su condición de equipo "copero" si el miércoles supera en la final de la Libertadores al Santos de Brasil, que le permitiría sumar cinco copas continentales a su vitrina contra dos de River.

Sin embargo, Maradona optó por la prudencia de cara al choque ante el Santos pese a que el conjunto argentino sacó una diferencia de dos goles en el encuentro de ida disputado
la semana pasada en la "Bombonera".

"Pase lo que pase Boca va a seguir siendo siempre "boquita", yo lo quiero muchísimo. Y ojo, no digo que estoy entregado pero tampoco digamos que la Copa la tememos dentro de
casa, que los "negritos" se despiertan y estamos jodidos", finalizó el astro.

Maradona no descartó viajar desde Cuba, donde realiza hace tres años un tratamiento contra su adicción a las drogas, a Brasil para presenciar el partido en el estadio Morumbí de San Pablo.