<
>

Atlas se desdibuja

GUADALAJARA -- La última imagen del Atlas al concluir el partido de vuelta de Cuartos de Final ante Santos, fue el augurio de lo que venía. Luego del arranque de furia de Tomás Boy por la burla de Darwin Quintero, el "Jefe" reunió a su grupo de jugadores y los llevó a la tribuna de la zona Norte del estadio Jalisco, donde se ubicaba la Barra 51.

La imagen era más que elocuente. Jugadores y cuerpo técnico, todos abrazados, agradecían a la afición por su apoyo en una temporada de ensueño. Se habían salvado del descenso y además clasificaron a la Liguilla luego de seis años de ausencia. Es decir, fueron dos regalos en un torneo que se esperaba de pesadilla.

Pero detrás de ese agradecimiento, también estaba la despedida de algunos de ellos.

Para empezar, el técnico ya tenía tomada su decisión desde un mes atrás. Bastaron unos días para confirmar que Boy no renovaba su contrato. Otro que también dio a entender que se iba era Isaac Brizuela, quien le obsequió su camiseta a los seguidores rojinegros mientras sus compañeros daban las gracias.

Al no continuar Boy, los directivos buscaron técnico y después de platicar con varios candidatos, el que aceptó las condiciones fue el argentino Omar Asad, quien hará su debut en el futbol mexicano.

Si el fichaje de Asad había generado escepticismo, la salida del goleador Omar Bravo, quien regresa a Chivas, ya ha creado mayor incertidumbre según las reacciones de los seguidores de los Zorros en redes sociales.

El mochiteco se había constituido como un goleador eficiente en el Atlas, y ahora regresa al Rebaño, el rival de la región.

En teoría el panorama no luce alentador para el Atlas.

Hay versiones que señalan que se contratará a Eial Strahman, el artillero argentino que brilló en la Liga de Ascenso con los Leones Negros de la U. de G., porque Asad lo dirigió en Vélez Sarsfield (en fuerzas básicas) y en el Emelec de Ecuador; oero eso se sabrá hasta el inicio del draft en Cancún este miércoles.

Por lo pronto, de cara al Apertura 2013, el Atlas luce muy distinto a lo que fue en el Clausura pasado.