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Cleveland honrará a Jim Brown

BEREA -- Aquellos suertudos que pudieron ver jugar a Jim Brown no tendrán dudas: era el mejor jugador de la NFL. Este enunciado no menosprecia a nadie; simplemente reconoce la combinación única de poder, velocidad, clase y visión que Brown poseía.

Nadie la ha tenido desde entonces.

Esta noche, los Cleveland Browns pondrán el nombre de Brown en el Anillo de Honor del equipo, un detalle que no se llevó a cabo la temporada pasada porque Brown y el entonces presidente Mike Holmgren, sostenían un desacuerdo público. Los principios de Brown no le permitían satisfacer las peticiones de Holmgren luego que el propio Holmgren cambió el rol de Brown con el equipo.

Jimmy Haslam trajo de vuelta a Brown, y lo integró a la nómina nuevamente, y esta noche será la noche.

Traten de explicar la grandeza de Brown en algunos cientos de palabras. Están los viejos videos, algunos granulados, de Brown rebotando tacleadores, a veces inclinándose hacia atrás. Están los juegos en que aceleraba para rebasar gente como si estuvieran estáticos. Está la carrera corta contra Dallas cuando corrió a la izquierda y de alguna forma anotó pese a que toda la defensiva de los Cowboys tuvo una oportunidad de detenerlo. El juego era distinto entonces. Los defensivos no eran tan fuertes ni tan rápidos. Pero el juego de Brown se podría trasladar a cualquier era, cualquier estilo.

Están las cifras. En su carrera, Brown promedió 5.2 yardas por acarreo. Tuvo al menos 1,200 yardas en siete de sus nueve temporadas. En tres de esas siete campañas jugó 12 partidos, en la otra jugó 14, y nunca tenía menos de 1,4000 yardas. Promedió más de 100 yardas por juego siete veces y promedió 104.3 por juego en su carrera. En 1963, tuvo un balance de 133.1 yardas por partido, 6.4 por acarreo.

Ningún otro jugador en la NFL ha promediado más de 100 yardas por juego en su carrera, Brown lo hizo al arrancar 118 de sus 118 partidos profesionales.

Terminó su carrera con 12,312 yardas, y se retiró a los 30 años por un pelea con el ex dueño Art Modell sobre su regreso para filmar "The Dirty Dozen". Esas 12,312 yardas llegaron en nueve campañas, lo que significa que promedió 1,368 yardas por año.

Brown también brilló en el lacrosse de Syracuse; a la fecha, es considerado uno de los mejores atletas en la historia del lacrosse, si no es que el mejor. Logró todo lo que hizo como un afroamericano jugando un deporte en tiempos que mantas de "no se permiten negros" eran colgadas en ciudades. Los prejuicios formaron su actitud, pero en el campo, el talento y empuje moldearon su juego.

El gran periodista Red Smith escribió alguna vez: "para velocidad mercurial, ligereza como el aire y violencia explosiva en un paquete de maldad sin destilar, no hay mejor que el señor Brown".

Aún no llega alguien como él. Esta noche, tendrá su momento frente a los aficionados de Cleveland.